
CHETUMAL, 05 de agosto.– Con la participación de más de 130 niñas y niños, arrancó con éxito el curso de verano “Mis Vacaciones en la Biblioteca 2025”, una iniciativa que busca reforzar el desarrollo integral de las infancias. Este proyecto, impulsado por la presidenta municipal de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez Hernández, tiene como objetivo ofrecer espacios donde las y los pequeños puedan aprender jugando, fortaleciendo tanto sus habilidades sociales como emocionales.
Este curso, implementado por la Dirección General de Bibliotecas en coordinación con la Dirección de Educación de Othón P. Blanco, incluye talleres diseñados por la Red Nacional de Bibliotecas. Las actividades llegan a niñas y niños de las comunidades de La Unión, Pucté, Rovirosa, Álvaro Obregón, Carlos A. Madrazo, Javier Rojo Gómez, Nicolás Bravo y Dos Aguadas, así como a la colonia Santa María en la capital del Estado.
Fomentando el amor por la lectura
Desde este día y hasta el próximo 15 de agosto, las y los participantes tendrán acceso a dinámicas lúdicas y educativas que buscan despertar su curiosidad, creatividad y amor por la lectura. Además de promover la adquisición de conocimientos, se pretende fortalecer el tejido social a través de la sana convivencia, en un entorno seguro y motivador para las infancias.

El curso se enmarca dentro del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo que impulsa la gobernadora Mara Lezama Espinosa, el cual busca construir entornos más seguros y libres de violencia. Esta estrategia busca que las niñas y niños cuenten con oportunidades para crecer en espacios que prioricen su bienestar y les alejen de conductas autodestructivas.
Importante es que estos cursos no solo funcionan como una alternativa educativa en vacaciones, sino que también sirven como una estrategia de prevención social. Especialistas en desarrollo infantil coinciden en que ofrecer actividades recreativas con contenido formativo ayuda a reducir el tiempo de ocio negativo, fomentando hábitos positivos que pueden impactar favorablemente en su futuro académico y personal.
Sin embargo, el reto no termina con organizar estos cursos: será fundamental darles continuidad durante el año para que los beneficios sean duraderos. Lograrlo requiere fortalecer el presupuesto para bibliotecas y programas comunitarios, además de involucrar activamente a madres, padres y tutores en el proceso de aprendizaje de sus hijas e hijos. De esta forma, iniciativas como “Mis Vacaciones en la Biblioteca 2025” pueden convertirse en pilares de transformación social en Quintana Roo.