CARACAS, Venezuela. — Este viernes, Nicolás Maduro Moros está listo para asumir un tercer mandato presidencial consecutivo en medio de la polémica sobre los resultados electorales y a pesar de las pruebas creíbles de que su contrincante Edmundo González Urrutia ganó las elecciones de 2024, así como las protestas callejeras encabezadas por María Corina Machado Parisca, la mayor referente de la oposición.
Los interrogantes están puestos sobre González Urrutia, quien ha manifestado que piensa estar en Caracas para la investidura pero no ha explicado cómo piensa hacerlo ni cuáles son sus planes al llegar. Está previsto que la ceremonia de toma del poder de Maduro tenga lugar en medio de manifestaciones de sus seguidores pero no está claro cuáles serán las acciones de los seguidores de la oposición después de la jornada de marchas de la víspera.
Edmundo González es reconocido como presidente electo por varios gobiernos.
Cierre de fronteras con Colombia
Las autoridades aeronáuticas venezolanas anunciaron este viernes la suspensión de los vuelos entre Venezuela y Colombia, país con el que comparte 2,200 kilómetros de frontera, hasta el próximo lunes 13 de enero.
La medida fue establecida mediante un aviso a aviadores que restringe las operaciones hacia el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, la principal terminal aérea que sirve a la ciudad de Caracas. La suspensión se produce en momentos en que el excandidato presidencial opositor Edmundo González Urrutia ha prometido regresar al país para juramentarse como presidente.
Previamente se había cerrado la frontera terrestre entre ambos países.
González, que regresó el fin de semana pasado a América Latina desde su exilio en Madrid, no ha ofrecido detalles de cómo pretende ingresar al país para presentarse en la investidura.
Blindaje a la sede de la Asamblea Nacional
Cientos de agentes de seguridad están desplegados en los alrededores de la Asamblea Nacional de Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro Moros rendirá juramento por un tercer mandato de 6 años, que concluiría hasta 2031, pese a no haber dado a conocer las actas de los resultados de las elecciones de 2024.
Los uniformados, con los rostros cubiertos y portando armas largas, detienen a los conductores para revisar sus vehículos y sus documentos en los puestos de control, muchos de ellos dispuestos desde principios de año.
Pocas personas caminan por las calles y escasea el transporte público. Las principales avenidas de Caracas que conducen al centro, sede los poderes públicos en Venezuela, están bloqueadas, lo que impide el acceso a los alrededores del Palacio Legislativo.