
Los copresidentes de Nicaragua, Daniel Ortega y Rosario Murillo, expresaron este lunes su respaldo al presidente de Rusia, Vladímir Putin, luego del ataque a la residencia de Putin, denunciado por Moscú como un intento terrorista atribuido al régimen de Ucrania. Desde Managua, el Gobierno nicaragüense manifestó su solidaridad y condenó el hecho en un contexto de alta tensión internacional.
Ortega y Murillo señalaron que este tipo de acciones buscan frenar los avances diplomáticos. Afirmaron que el ataque a la residencia de Putin tiene como objetivo “anular la fuerza de las conversaciones que buscan acercar la paz”, en referencia a los esfuerzos internacionales por resolver el conflicto en Ucrania mediante la vía del diálogo.
Condena política por el ataque a la residencia de Putin
En su pronunciamiento, las autoridades nicaragüenses calificaron el hecho como una conducta propia del fascismo y reiteraron su apoyo a Rusia. Para Managua, el ataque a la residencia de Putin no solo representa una amenaza directa contra el jefe de Estado ruso, sino también un riesgo para la estabilidad regional y global.
El Gobierno de Nicaragua destacó que este tipo de agresiones se producen en momentos clave para las negociaciones internacionales. En ese sentido, subrayó que el ataque a la residencia de Putin va en contra de los esfuerzos por reducir la confrontación y avanzar hacia una solución pacífica del conflicto.
Detalles del ataque a la residencia de Putin con drones
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, informó que el régimen de Kiev intentó ejecutar el ataque a la residencia de Putin mediante el uso de más de 90 vehículos aéreos no tripulados de largo alcance. Según el canciller, la ofensiva ocurrió durante la noche del 28 al 29 de diciembre.
Lavrov precisó que se contabilizaron 91 drones, todos ellos derribados por los sistemas de defensa aérea rusos. Aclaró que, tras el ataque a la residencia de Putin, no se registraron víctimas ni daños materiales, gracias a la respuesta inmediata de las fuerzas de seguridad.
El canciller ruso también destacó que el intento de ataque a la residencia de Putin se produjo en medio de intensas negociaciones entre Rusia y Estados Unidos para resolver el conflicto ucraniano. Advirtió que acciones de este tipo no quedarán sin respuesta y que las Fuerzas Armadas rusas ya han determinado los objetivos y el momento de posibles acciones de respuesta.
Como valor agregado, analistas internacionales consideran que el ataque a la residencia de Putin marca un punto especialmente delicado del conflicto, al involucrar directamente la seguridad del presidente ruso. Señalan que este tipo de episodios puede endurecer las posturas






