México desaprovecha el potencial de la cannabis, un mercado que valdría al menos 230 millones de dólares anuales, a pesar de cumplirse este miércoles dos años del histórico fallo de la Suprema Corte que declaró inconstitucional la prohibición de la marihuana.
La Corte invalidó la prohibición absoluta del consumo recreativo del cannabis el 28 de junio de 2021, pero desde entonces la legislación se ha atascado en el Congreso y permanecen las trabas para obtener permisos de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Especialistas explican esta parálisis, en parte, con la postura conservadora del presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien apenas esta semana reiteró su teoría que la marihuana es una puerta a otras drogas al criticar su liberalización en Estados Unidos.
¿Por qué autorizan que los basquetbolistas de la liga más famosa de básquetbol de Estados Unidos puedan fumar marihuana, si estamos hablando de un deporte y son los ídolos de los jóvenes? Y también, ¿por qué no revisan cómo abrieron el consumo de las drogas sin tomar en cuenta que iban a fomentar consumos de otras drogas más dañinas?”, cuestionó en su rueda de prensa matutina del lunes.
Una industria verde que no prospera
Pese al fallo de la Corte, no existen leyes para obtener permisos para la importación, exportación, venta e industrialización de la cannabis y el cáñamo, lamentó Raúl Elizondo, cofundador de la Cámara de la Industria del Cannabis en México y creador de la empresa Hempmeds.
“No hemos avanzado en la regulación de la marihuana como tal en México, sobre todo en el uso lúdico o uso personal, que es el tema de la declaratoria de inconstitucionalidad, que ya tenemos tiempo de que ocurrió”, apuntó Elizondo en entrevista con EFE.
Un análisis de la organización CannabiSalud citó, con base en datos de la consultora Statista, que si el mercado recreativo en México se regulara hoy, alcanzaría un valor de 230 millones de dólares en 2024 en comparación con 60 millones de dólares estimados en 2022.
Elizondo consideró que el país desaprovecha la oportunidad dentro del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Estados Unidos hoy en día es el mercado más grande del mundo. Hablando sobre el uso industrial de la cannabis, del cáñamo, en Estados Unidos es legal, en Canadá, es legal. Nuestros dos principales socios comerciales tienen una legalidad en cuanto a la siembra de cáñamo”, observó.
La principal consecuencia de los vacíos legales en México, según Elizondo, es que “las personas siguen sin poder hacer valer su derecho”, pues “hoy en día siguen siendo detenidas personas por portaciones mínimas de cannabis que son para uso personal”.
Oportunidades de la cannabis en turismo y salud
Aunque persisten lagunas legales sobre el consumo lúdico, este 2023 se cumplen seis años de que el Congreso aprobó el uso medicinal de la cannabis en 2017 y dos años del reglamento sobre el tema.
Aun así, este es un ámbito que tampoco se aprovecha, aseveró Denyse Espinosa, cofundadora de Revolución con Flores, una empresa que busca impulsar la industria cannábica.
“Es algo que el día de hoy tenemos que empezar a utilizar porque existe y nadie lo utiliza. Entonces ahí está una gran oportunidad que considero que nadie está volteando a ver, o muy pocas personas, que nos permite generar investigación y educación, y ese es el primer paso que han realizado los países que ya regularon”, expuso.
CannabiSalud reportó que el 29 por ciento de los turistas de placer y 18 por ciento de los estadounidenses están interesados en actividades relacionadas con la cannabis, al citar el reporte “Cannabis Tourism: Opportunities, Issues and Strategies” de MMGY Travel Intelligence.
Revolución con Flores trabaja para impulsar el turismo médico de cannabis, por lo que espera aprovechar el mundial de fútbol que México hará en conjunto con Estados Unidos y Canadá en 2026 para promoverlo.
Espinosa argumentó que una legislación sobre marihuana es importante porque impedirá que los grandes intereses se aprovechen del mercado, capacitar a pequeñas y medianas empresas, y tener una educación que evite las adicciones, temas en los que trabaja su organización.
La cannabis no es algo que cura, pero sí ayuda a reducir algunos síntomas. Entonces, creo que eso también puede aplicar a la sociedad y nos estamos perdiendo la oportunidad de crear un México completamente diferente, un México con una cultura de amor a las plantas medicinales, de respeto, de salud mental”, opinó.
Con información de EFE