
16 de Diciembre del 2025.- La sesión de este martes en la Rada Suprema inició con un caos total debido a una protesta inesperada. La legisladora Mariana Bezúglaya decidió impedir el inicio normal de las actividades bloqueando físicamente el podio principal de la cámara legislativa. Utilizando cinta roja y colocando varios carteles visibles, la política se aseguró de que nadie pudiera ignorar su presencia ni sus demandas urgentes frente a sus colegas, paralizando momentáneamente el trabajo legislativo en un momento crítico para el país.
El objetivo principal de esta manifestación de la diputada Mariana Bezúglaya era exigir cambios inmediatos en la cúpula militar. En sus carteles se podía leer claramente la petición de renuncia del actual comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Alexánder Syrski. Según ella, es necesario detener la desinformación sobre lo que realmente ocurre en el frente de batalla, argumentando con firmeza en uno de sus mensajes escritos que «las mentiras en el frente matan» a los soldados ucranianos.
Antes de que estallara el conflicto físico dentro del recinto, la política Mariana Bezúglaya anunció sus intenciones a través de sus redes sociales para alertar al público. Publicó una fotografía de la tribuna envuelta en la cinta y con los carteles ya colocados, acompañada de un mensaje sarcástico que decía «Buenos días. El podio está bloqueado». Con esta acción digital, buscaba ganar apoyo externo y dejar claro que su protesta no era un acto impulsivo, sino una estrategia planeada.
Tensión y enfrentamientos físicos en el recinto
La situación se salió de control cuando otros legisladores intentaron recuperar el orden en la sala por la fuerza. El diputado Serguéi Taruta se acercó para arrancar los carteles de protesta, lo que provocó que Mariana Bezúglaya reaccionara físicamente para defender su manifestación. Ambos políticos terminaron forcejeando en medio del salón, creando una imagen lamentable y tensa mientras, irónicamente, sonaba el himno nacional de Ucrania de fondo durante la pelea.
El desorden no se limitó solo a los empujones, sino que también hubo fuertes agresiones verbales entre los presentes. Durante el altercado, la legisladora Mariana Bezúglaya tuvo un intercambio de palabras muy subido de tono con otro colega, el diputado Nikolái Tíshchenko. Testigos en el lugar confirmaron que ella le gritó «vete a la mierda», demostrando el nivel de hostilidad y frustración que se vive actualmente entre los representantes políticos en medio de la crisis de la guerra.






