Playa del Carmen, Q. Roo.- El último año de la gestión de Lili Campos Miranda como presidenta municipal de Solidaridad estuvo marcado por gastos millonarios en espectáculos, ferias y eventos públicos. De acuerdo con una revisión de contratos en la Plataforma Nacional de Transparencia, la administración panista destinó casi 123 millones de pesos a actividades de entretenimiento, incluso después de sufrir una derrota electoral en su intento de reelección.
El gasto más significativo fue la Feria de Playa del Carmen 2024, con un desembolso total de más de 60 millones de pesos. Entre los artistas contratados estuvieron Carín León, quien recibió 26.6 millones de pesos, y la Banda El Recodo, que obtuvo 6.9 millones. Además, se destinaron 13.9 millones a la empresa Pro Show Productions para la organización del evento, y 6.4 millones para logística proporcionada por PPI Planeación Profesional Integral.
Otros eventos destacaron por su presupuesto elevado, como el Día de las Madres, en el que participaron artistas como Dulce, Alicia Villarreal y Susana Zabaleta. En total, se gastaron más de 22 millones de pesos en servicios y presentaciones artísticas. Por su parte, el Carnaval 2024 incluyó a la Banda MS, que fue contratada por 21.5 millones de pesos.
El gobierno de Campos también invirtió recursos en eventos como el Día del Niño, con un contrato de más de 12 millones de pesos, y la Marcha del Orgullo LGBTTTIQ+, que tuvo un costo de más de 6 millones de pesos. En esta última, destacó la participación de la cantante Paulina Rubio en un concierto que cerró las actividades.
Aunque los eventos fueron ampliamente publicitados y atrajeron grandes audiencias, estos gastos han generado controversia, especialmente por la cantidad de dinero público utilizada y la falta de difusión de algunos detalles en redes oficiales. La revisión de estos contratos sigue siendo tema de discusión entre ciudadanos y autoridades locales.
Es genial que se estén tomando medidas para cuidar el medio ambiente, pero a veces parece que se quedan solo en palabras. Necesitamos acciones concretas, no solo promesas. La gente quiere ver cambios reales y no solo charlas vacías.