5 de Noviembre del 2025.- El Ferrocarril del Oeste de Austria, conocido como Westbahn, está expandiendo su flota de transporte con nuevos trenes chinos. Esta decisión ha generado un fuerte debate en el país, según informan los medios locales. Los nuevos trenes fueron suministrados por la reconocida fabricante china CRRC. Se trata de uno de los primeros despliegues de este tipo de material rodante chino en la Unión Europea.
Los cuatro nuevos trenes son modelos de dos pisos y entrarán en servicio en las próximas semanas. La operadora Westbahn anunció que estas unidades cubrirán la popular ruta que conecta Viena con Salzburgo. El acuerdo comercial se ha establecido bajo un contrato de arrendamiento flexible. Este contrato tiene una duración de 10 años, pero incluye una opción de compra en cualquier momento.
El valor total del trato asciende a 70 millones de euros, lo que equivale a unos 80 millones de dólares. Según el director general de Westbahn, Marco Ramsbacher, la decisión de elegir a CRRC se tomó por varias razones. El directivo explicó que la elección se basó en motivos de calidad, innovación y, sobre todo, el tiempo de entrega ofrecido por la compañía asiática.
Con la introducción gradual de estos trenes chinos, la flota de Westbahn crecerá hasta un total de 19 unidades. Esto representa un aumento muy importante de la oferta, calculado en un 28 por ciento. En términos prácticos, la compañía pasará a ofrecer casi 10.000 asientos. Además, se aumentarán las conexiones diarias desde y hacia Viena-Westbahnhof, pasando de 60 a 66 viajes.
Cada uno de estos nuevos trenes consta de seis vagones y ofrece 536 asientos, con una capacidad total de más de 1.250 pasajeros. A pesar de ser más largos que la flota actual, estos trenes son más eficientes. Consumen hasta un 10 por ciento menos de energía. Para los viajeros, se prometen asientos ajustables, enchufes en cada lugar y Wi-Fi gratuito, además de una nueva función NFC.
Fuerte Oposición de la Cámara de Trabajo
El acuerdo ha provocado una reacción de indignación en la Cámara de Trabajo de Austria. Lukas Oberndorfer, jefe del Departamento de Clima, Medio Ambiente y Transporte, fue muy crítico. Describió el hecho como «uno de los primeros despliegues de trenes chinos en el transporte ferroviario de pasajeros en la UE». Oberndorfer advirtió que esto representa un gran peligro para la industria ferroviaria austriaca y los trabajos que esta genera.
El representante de la Cámara de Trabajo se pronunció a favor de que la Unión Europea tome cartas en el asunto. Solicitó que la UE revise de manera urgente sus criterios de aprobación para este tipo de adquisiciones. La preocupación principal es la competencia que representa el material rodante chino para las empresas locales, que podrían verse desplazadas si no se establecen nuevas reglas de mercado.
Defensa y Críticas a la Burocracia de la UE
Por su parte, Hans Peter Haselsteiner, accionista de Westbahn, defendió la compra de los trenes. El industrialista señaló que, aunque son de fabricación china, dichos trenes constan de componentes y materiales europeos hasta en un 50 por ciento. Haselsteiner aprovechó para arremeter contra los largos trámites de aprobación que existen en la Unión Europea para el sector ferroviario.
