13 de Agosto 2025.- Leonardo DiCaprio confesó que el mayor arrepentimiento de su carrera fue no protagonizar Boogie Nights (1997), la película de culto dirigida por Paul Thomas Anderson sobre el auge y caída de una estrella del cine porno en los años setenta. El actor dejó pasar la oportunidad debido a su compromiso con Titanic, filme que lo catapultó a la fama mundial y consolidó su carrera en Hollywood. En una reciente entrevista con Esquire, DiCaprio se mostró honesto sobre esa decisión y reconoció la importancia que tuvo la película en su generación.
El papel que nunca fue
Anderson pensó en DiCaprio para el papel de Eddie Adams —alias Dirk Diggler— tras verlo en The Basketball Diaries (1995). Sin embargo, el rodaje de Titanic coincidía con las fechas de Boogie Nights, por lo que DiCaprio recomendó a Mark Wahlberg para el papel, quien finalmente se convirtió en protagonista. El actor comentó: “No puedo imaginar a nadie más que Mark en ella. Cuando finalmente vi esa película, pensé que era una obra maestra”, subrayando la influencia cultural del filme y su relevancia para la industria cinematográfica de los noventa.
La decisión, aunque dolorosa en retrospectiva, permitió a DiCaprio construir una carrera versátil y sólida, protagonizando éxitos internacionales que consolidaron su estatus como una de las mayores estrellas de Hollywood. En declaraciones previas a GQ, reflexionó: “Me habría encantado hacer las dos. Pero la verdad es que, si no hubiera hecho Titanic, no habría podido hacer los dos tipos de películas o tener la carrera que tengo ahora”.
Boogie Nights y su legado
Boogie Nights, estrenada el 10 de octubre de 1997, fue un éxito de crítica y recibió tres nominaciones al Óscar: Mejor Actor de Reparto para Burt Reynolds, Mejor Actriz de Reparto para Julianne Moore y Mejor Guion Original para Anderson. Ambientada en el Valle de San Fernando, la cinta narra la transformación de Eddie Adams de lavaplatos a estrella del cine pornográfico durante la “Edad de Oro del Porno”, abordando luego la caída por excesos y adicciones en los ochenta. Su elenco incluyó a Philip Seymour Hoffman, Heather Graham, John C. Reilly, Don Cheadle y William H. Macy, consolidando a la película como un referente de los años noventa.
Paradójicamente, Burt Reynolds, quien recibió elogios por su interpretación, se distanció de la película antes de su nominación y despidió a su agente por conseguirle el papel. Aun así, antes de su fallecimiento en 2018, la describió como “extraordinaria”, reconociendo su valor artístico y cultural. La película ha sido considerada, con los años, una de las grandes obras de Anderson y una de las más influyentes de la década.
Reencuentro en One Battle After Another
Tres décadas después, DiCaprio y Anderson finalmente trabajaron juntos en One Battle After Another, que llegará a los cines el 25 de septiembre bajo la distribución de Warner Bros. En esta película, DiCaprio interpreta a Bob Ferguson, “un revolucionario desaliñado y sin recursos en una misión desesperada por salvar a su hija adolescente”. Ambos creativos destacaron la importancia de esta colaboración tras tantos años de espera, demostrando la persistencia de DiCaprio en buscar proyectos con significado y relevancia personal.
Este reencuentro también resalta la trayectoria de DiCaprio en elegir papeles con impacto cultural y social. Al participar en One Battle After Another, el actor no solo continúa trabajando con directores de renombre, sino que refuerza su interés en historias que cuestionan estructuras sociales y políticas, mostrando su compromiso con proyectos cinematográficos que trascienden la pantalla y generan reflexión en la audiencia.
