Cancún, Q. R., a 16 de diciembre de 2025.
Con el objetivo de impulsar la creatividad y el talento desde la infancia, la Secretaría de Economía ha lanzado una convocatoria dirigida a niñas y niños para participar en el Primer Concurso de Propiedad Intelectual denominado “Jugando, Inventamos y Creamos”. Esta iniciativa, promovida en colaboración con el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), busca sembrar en los más jóvenes la importancia de la innovación, la imaginación y, sobre todo, el reconocimiento y la protección de sus ideas originales desde una edad temprana.
El concurso está diseñado como un espacio lúdico donde los participantes pueden plasmar sus ideas y convertirlas en invenciones o creaciones que posteriormente puedan ser protegidas bajo el marco de la Propiedad Intelectual. Con esto se busca que, a través del juego, los niños comprendan cómo sus pensamientos creativos tienen un valor real y pueden ser registrados legalmente, fomentando así una cultura de la innovación.
El periodo de registro y recepción de trabajos ya está en marcha, ofreciendo un amplio margen de tiempo para que los niños y sus familias preparen sus propuestas. La convocatoria se abrió el pasado 10 de diciembre de 2025 y permanecerá abierta hasta el 27 de febrero de 2026. Este lapso permite la participación de un gran número de infantes, asegurando que las escuelas y los padres tengan tiempo de organizar las creaciones de los pequeños inventores.
La Secretaría de Economía enfatizó que esta iniciativa es crucial para seguir creando oportunidades que permitan a las infancias desarrollar su máximo potencial creativo. Al familiarizarlos con el concepto de Propiedad Intelectual, se les brindan las herramientas básicas para que, en el futuro, puedan innovar y proteger sus invenciones, contribuyendo al desarrollo tecnológico y artístico del país.
El concurso es una estrategia para incentivar el pensamiento inventivo y diferenciador, habilidades que son esenciales en la economía moderna. Al participar, los niños no solo ganan reconocimiento, sino que también aprenden el proceso de conceptualización y materialización de una idea, desde la imaginación hasta el producto final, fomentando el espíritu emprendedor.
El concurso de Propiedad Intelectual busca explicar a los participantes, de manera sencilla y didáctica, los tipos de protección que existen, como las patentes para inventos y los derechos de autor para obras artísticas. Se espera que, con estas bases, los niños entiendan que un dibujo, una historia o un mecanismo que ellos idean, puede ser un activo valioso, enseñándoles el respeto por las creaciones ajenas y el valor de las propias.
