
Científicos han alertado que la Tierra girará más rápido de lo normal en dos fechas específicas: el 22 de julio y el 5 de agosto de 2025. Aunque la diferencia será mínima y pasará desapercibida para la mayoría de las personas, este cambio es relevante para sistemas tecnológicos de alta precisión que requieren una sincronización exacta.
Días más cortos por milisegundos
De acuerdo con el Servicio Internacional de Rotación de la Tierra y Sistemas de Referencia (IERS), la aceleración de la rotación terrestre causará que ambos días sean entre 1.3 y 1.5 milisegundos más cortos de lo habitual. Aunque parezca insignificante, esta variación es lo suficientemente importante como para afectar relojes atómicos, redes de comunicación y sistemas GPS.
¿Qué está provocando este fenómeno?
Las causas de este cambio no están del todo claras. Algunos científicos apuntan a las dinámicas internas del planeta, como los movimientos del núcleo fundido de la Tierra, que pueden alterar la distribución de masa y, por lo tanto, su velocidad de rotación. Otros investigadores creen que la gravedad de la Luna, especialmente cuando está en su punto más lejano (apogeo), puede ejercer una fuerza que acelera ligeramente el giro terrestre.
Este fenómeno no es completamente nuevo. De hecho, comenzó a detectarse con mayor claridad en 2020 y ha sido objeto de estudio desde entonces. Sin embargo, aún no hay un consenso claro entre la comunidad científica sobre su origen exacto. Algunos modelos atmosféricos y oceánicos han intentado explicar el fenómeno, pero hasta ahora ninguno ha sido concluyente.
Aunque la aceleración no tendrá efectos directos sobre la vida cotidiana, sí representa un reto para científicos y técnicos que deben ajustar sistemas altamente sensibles. Los relojes atómicos, por ejemplo, podrían requerir correcciones de milisegundos para mantener su precisión.