
2 de Diciembre del 2025.- La noche se iluminó en el Malecón Tajamar de Cancún con una actuación memorable que dejó a todos los aficionados con un excelente sabor de boca tras el silbatazo final. La Selección Mexicana de Socca demostró su gran calidad y potencia ofensiva al imponerse con un marcador abultado de 8 goles contra 1 frente al equipo de Australia. Con este resultado tan contundente, el conjunto tricolor no solo aseguró los tres puntos en disputa, sino que selló oficialmente su boleto para jugar la siguiente fase del torneo, confirmando que es uno de los rivales más fuertes y decididos a levantar la copa en esta competencia internacional.
Desde que comenzó el partido, quedó muy claro que el combinado nacional de Socca no tenía intenciones de especular ni de darle tiempo al rival para acomodarse en el terreno de juego. Apenas corría el primer minuto del encuentro cuando Bryan Lares hizo explotar el grito de gol en las gradas, abriendo el marcador de manera inmediata. Esta anotación temprana fue fundamental para quitarse la presión de encima y marcar el ritmo de un partido que, a la postre, se convertiría en una auténtica fiesta de goles para los locales que disfrutaban del apoyo de su gente.
La presión que ejerció la escuadra mexicana de Socca fue tan intensa que los jugadores australianos apenas podían salir de su propia mitad de la cancha sin perder el balón. Al minuto 8, José Ruvalcaba aprovechó el desconcierto de la defensa rival para anotar el segundo tanto y ampliar la ventaja en el marcador electrónico. Poco tiempo después, al minuto 18, nuevamente apareció la figura de Bryan Lares para poner el 3-0 momentáneo, dejando a los visitantes de Oceanía sin ninguna capacidad de respuesta ante la velocidad y precisión de los ataques locales.
El momento más espectacular de la noche llegó gracias a una jugada individual que levantó a todos los espectadores de sus asientos para aplaudir la técnica mostrada. Erick Galván, integrante de la Selección Mexicana de Socca, tomó la pelota y conectó un potente derechazo desde fuera del área que viajó con gran velocidad. El balón terminó golpeando el poste izquierdo antes de meterse a la portería, decretando el 4-0; fue un gol de muy alta manufactura que demostró el talento individual que posee el equipo, además de su buen juego colectivo.

Cierre espectacular del partido
Aunque el equipo de Australia intentó reaccionar tímidamente con un gol de Sheribn al minuto 25, esto solo sirvió como una pequeña pausa en el dominio absoluto de los locales. Ese gol en contra no desanimó en lo absoluto al representativo azteca de Socca, sino que pareció motivarlos a buscar más anotaciones para asegurar que no hubiera ninguna sorpresa. La defensa se ajustó rápidamente y el medio campo volvió a tomar el control de la posesión de la pelota para evitar cualquier otro acercamiento peligroso por parte de los rivales.
Para la segunda mitad del encuentro, la Selección Mexicana de Socca aceleró el paso y terminó por desbordar físicamente a sus oponentes, que ya se notaban muy cansados por el esfuerzo. Los goles siguieron cayendo uno tras otro como una cascada, completando la goleada final de 8-1 que reflejó la enorme diferencia de nivel que hubo esa noche en la cancha. Cada llegada al área rival se sentía con mucho peligro y los delanteros mostraron una puntería envidiable que ilusiona a toda la afición de cara a los partidos más difíciles que vendrán.








