
WASHINGTON (EFE).— La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó a México a intensificar las investigaciones sobre el hallazgo de restos humanos en un rancho de Teuchitlán, Jalisco, presuntamente usado como campo de adiestramiento del CJNG.
La CIDH reconoció la labor de los colectivos de búsqueda, que denuncian que el sitio era un “campo de exterminio del narcotráfico”.
El rancho Izaguirre ha estado bajo custodia desde septiembre, pero seis meses después, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco descubrió fosas clandestinas con restos calcinados.
La CIDH recordó que la búsqueda ciudadana no exime al Estado de su responsabilidad de investigar y esclarecer los hechos.
El organismo pidió a México actuar con diligencia para sancionar a los responsables, reparar a las víctimas y garantizar la identificación científica de los restos. También valoró la decisión de la presidenta Sheinbaum de fortalecer la Comisión Nacional de Búsqueda.
Asimismo, reiteró su respaldo a los colectivos de búsqueda, destacando que su labor debe ejercerse con seguridad y sin obstáculos.