
La noche del 15 de octubre de 2025 quedará marcada en los anales de la moda y la música. Con su paso firme por la pasarela, Karol G se convirtió oficialmente en la primera artista colombiana en portar las alas de Victoria’s Secret durante el esperado desfile mundial. Lo hizo con un conjunto rojo de encaje transparente, detalles cristalinos, tacones florales y la icónica pluma alada, en una declaración visual que fue mucho más que moda.
Durante su caminata bajo la palabra “LATINA” proyectada en la pasarela, Karol G evidenció su orgullo por su herencia cultural. Esa imagen, además de estética, representa un triunfo simbólico: que una mujer latina pueda ocupar un lugar central en un espectáculo que históricamente ha sido dominado por estándares eurocéntricos.
El show: música y moda entrelazadas
Bajo la dirección creativa de Adam Selman, el desfile buscó reinterpretar la experiencia Victoria’s Secret como una travesía del día a la noche de la mujer moderna, combinando sensualidad, individualidad y energía global. Karol G encabezó el cartel musical junto con Madison Beer, Missy Elliott y las integrantes de TWICE como Nayeon, Momo, Tzuyu y Jihyo, aportando un cruce sonoro de diversas latitudes.
En su actuación abrió con “Ivonny Bonita”, un tema con tintes de bachata incluido en su nuevo álbum Tropicoqueta. Mientras las modelos desfilaban, su voz fluía con fuerza y sensualidad, en sintonía con la estética que impregnaba la pasarela. En un momento clave, volvió al escenario ya con las alas puestas y entonó “Latina Foreva”, una canción que celebra identidad y autoestima.
Más que alas: tecnología y retail en directo
Un elemento importante de esta edición fue la apuesta tecnológica: por primera vez, los looks presentados pudieron adquirirse en tiempo real a través del sitio web de Victoria’s Secret, su app, algunas tiendas físicas y Amazon Fashion. De esta forma, el desfile dejó de ser un espectáculo exclusivo para asistentes y espectadores pasivos, para transformarse en una experiencia de compra inmediata.
La colección presentada abarcó colores intensos, inclusión corporal y la reinvención de las alas clásicas, adaptadas a la visión moderna de la marca para 2025. Al unir modelos, música femenina y diversidad, el desfile «respiró» con un pulso que muchos consideran le hacía falta al formato.
Al desplegar esas alas rojas y desfilar bajo la palabra “LATINA”, Karol G no solo caminó: marcó una nueva ruta simbólica para artistas latinoamericanas en el mundo de la moda global.
Aunque esta sea la primera vez que una colombiana recibe las alas de Victoria’s Secret, el reconocimiento de mujeres latinas ha ido creciendo en distintas fórmulas dentro de la industria. Desde modelos latinoamericanas que han protagonizado campañas importantes hasta diseñadoras emergentes que aportan identidad cultural a sus creaciones, la moda ha ido abriendo caminos. Sin embargo, los retos persisten: la visibilidad real, la contratación equitativa, y el empoderamiento auténtico más allá del espectáculo.
La aparición de Karol G como ángel no reemplaza esas luchas, pero las visibiliza. Su presencia fuerza preguntas sobre quién pertenece a “lo ideal” de la moda, qué cuerpos se legitiman y cómo las marcas tradicionales pueden transformarse para ser inclusivas y relevantes. Si este momento se convierte en un impulso duradero para otras mujeres latinas en el mundo del modelaje y el diseño, entonces su paso por la pasarela habrá significado algo más que un show.
