
9 de abril 2025- Un jugador identificado como Alcidez Pérez Aguilar del equipo «Los Primos» protagonizó un incidente violento en el campo de softbol de la Región 103 de Cancún, dejando al ampayer con costillas fracturadas. Este hecho ha causado una gran indignación en la comunidad deportiva local, pues resalta la falta de respeto y espíritu deportivo en algunas situaciones. El ataque se ha convertido en un tema de conversación en la ciudad, con muchos exigiendo justicia para la víctima y medidas preventivas en el deporte.
El Inicio del Conflicto: Insultos y Expulsión
De acuerdo con los testigos, el conflicto comenzó cuando Alcidez Pérez Aguilar comenzó a insultar al ampayer durante el partido. El árbitro, siguiendo las reglas del juego, le pidió que cesara su actitud y, al no recibir respuesta, procedió a expulsarlo del campo. Sin embargo, en lugar de aceptar la sanción con deportividad, el jugador continuó con su actitud desafiante, lo que llevó al árbitro a tomar la decisión de expulsarlo. Este acto de disciplina fue el detonante de una agresión que no solo manchó el espíritu deportivo, sino que puso en peligro la seguridad de una persona.

El Ataque: Un Acto Premeditado y Cobarde
Tras su expulsión, Alcidez Pérez Aguilar reaccionó de manera violenta. El jugador levantó un bate con la intención de golpear al ampayer en la cabeza. Afortunadamente, el árbitro logró esquivar el primer golpe, pero el jugador no se detuvo allí. En lugar de abandonar la confrontación, Alcidez persiguió al ampayer y le propinó dos batazos en las costillas, causándole fracturas. Este acto de agresión fue detenido por la intervención de otros jugadores presentes en el campo, quienes rápidamente intervinieron para evitar que la situación escalara aún más.
La Huida del Agresor
Después de cometer el ataque, Alcidez Pérez Aguilar subió a su camioneta azul, con placas SZ1509N, y huyó del lugar, evitando ser detenido. Sin embargo, antes de irse, intentó atropellar a algunas personas que lo habían seguido en un intento por detenerlo. La huida del agresor generó una gran indignación entre los testigos, quienes lo calificaron como un acto cobarde y peligroso. A pesar de los esfuerzos por detenerlo, Alcidez logró escapar, lo que ha generado un creciente malestar en la comunidad deportiva y en la sociedad en general.

La Comunidad Exige Justicia
La comunidad deportiva de Cancún ha reaccionado con firmeza ante este acto de violencia. Los testigos y miembros de la comunidad exigen que Alcidez Pérez Aguilar sea localizado y se haga responsable por su comportamiento. Además, se pide que el agresor cubra los gastos médicos del ampayer, quien no cuenta con los recursos necesarios para su tratamiento. Este lamentable suceso ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en los eventos deportivos, para evitar que se repitan situaciones de violencia en el futuro.