CIUDAD DE MÉXICO.- Este domingo la Iglesia mexicana propuso una serie de 12 deseos para construir un mejor país en el año que comienza e hizo un llamado a toda la sociedad a trabajar para hacer realidad estos anhelos.
Por medio de su editorial dominical Desde la Fe, la Arquidiócesis de México invitó a la población a poner en manos de Dios los planes y proyectos personales.
“También nuestros deseos de bien común, dispuestos siempre a colaborar para hacer realidad el México que tanto soñamos”.
12 deseos para construir un mejor México
El primero fue por la paz en México, para que sea un lugar en el que las “familias puedan vivir sin miedo; que nuestras calles, hogares y espacios públicos sean sitios seguros para todos”
“Que las instituciones encargadas de garantizar la seguridad trabajen en estrategias integrales para prevenir la violencia”.
Igual pidió que se pueda contar con un sistema de salud accesible, donde toda persona reciba un trato “digno y respetuoso”, además de que se dé el debido interés a la salud mental, que haya mejora “sustantiva” en hospitales y que la gente sea solidaria con los enfermos.
También pidió un sistema de justicia “imparcial, pronto y expedito” en el que se apliquen las leyes con responsabilidad y que los ciudadanos sean justos, responsables y honestos en el trato cotidiano.
El cuarto deseo fue tener unidad social para que las divisiones sociales se transformen en “puentes de entendimiento y colaboración para construir un México más fuerte”.
Un anhelo es la integración de las familias para que se mantengan unidas, fortalezcan lazos afectivos y promuevan el respeto y la solidaridad.
Otro deseo fue la caridad con los más necesitados.
El séptimo fue para el respeto a los migrantes, en donde pidió que México se convierta en un país “sensible al sufrimiento de los migrantes; que los respete, les brinde un trato digno y los reconozca como hermanos desfavorecidos”.
Iglesia pide infancias felices y protegidas
El octavo deseo estuvo dedicado al cuidado de la niñez para que todas las infancias estén felices y protegidas y tengan oportunidades de educación, salud, desarrollo integral, diversión, esparcimiento y un trato digno.
Como noveno se pidió el acompañamiento a víctimas de la violencia, especialmente para las que enfrentan la ausencia de un ser querido, y pidió que reciban apoyo emocional, jurídico y social.
Que “cada madre, padre o familiar de un desaparecido reciba un acompañamiento integral, además de un trato digno y respetuoso, tanto de las autoridades como de los ciudadanos”.
Para el décimo anhelo la Iglesia pidió equidad entre hombres y mujeres y pidió que se valore el “enorme aporte” de la mujer en el hogar, la familia y la sociedad y que existan las mismas oportunidades de desarrollo, y promover un entorno de equidad.
El número 11 fue para el respeto a la vida humana, que cada una, dijo, sea “valorada, respetada y preservada, desde su concepción hasta su muerte natural”.
Para terminar y como doceavo deseo pidió que se realicen acciones para construir un México responsable en materia medioambiental.
“Donde se protejan los recursos naturales y se fomente el cuidado del planeta, tanto en el hogar, la escuela y a través de políticas públicas”.