28 OCTUBRE 2025-INTERNACIONAL-El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) anunció la detención de más de 3.000 migrantes en Chicago y otras ciudades de Illinois, como parte de la llamada Operación Midway Blitz, lanzada el pasado 8 de septiembre por la administración de Donald Trump. La cifra, confirmada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), representa un incremento significativo respecto a los poco más de mil arrestos reportados en el primer mes de la operación, lo que evidencia una intensificación de las redadas migratorias en todo el estado.
Según el comunicado del DHS, esta campaña fue bautizada en memoria de Katie Abraham, una joven de Illinois que perdió la vida en un atropello y fuga cometido por un inmigrante en situación irregular. Las autoridades indicaron que el objetivo principal de la operación es detener a los “peores inmigrantes ilegales delincuentes”, señalando que entre los arrestados se encuentran presuntos violadores, asesinos y miembros de pandillas.
ICE intensifica redadas en Illinois
La Operación Midway Blitz ha generado reacciones encontradas en todo el país. Mientras algunos sectores conservadores la aplauden por reforzar la seguridad y “hacer cumplir la ley”, organizaciones de derechos humanos y comunidades migrantes la consideran una política de persecución con tintes políticos. En Chicago, grupos defensores de inmigrantes denunciaron que las redadas se llevaron a cabo en zonas residenciales y lugares de trabajo sin órdenes judiciales claras.
Denise Lorence, madre de la joven Katie Abraham, expresó públicamente su desacuerdo con que el nombre de su hija fuera utilizado para encabezar la campaña. En una carta publicada en el Chicago Tribune, señaló que su hija “no habría querido esto”, y que “no habría querido ser parte de una ofensiva que siembra miedo en la ciudad que amaba”. Las declaraciones de Lorence resonaron ampliamente en redes sociales, donde varios usuarios acusaron al gobierno de usar una tragedia personal con fines políticos.
Debate sobre el impacto y las motivaciones
El DHS, por su parte, defendió la medida argumentando que “ninguna ciudad es un refugio seguro para inmigrantes ilegales delincuentes”. En palabras del comunicado oficial: “Si vienes a nuestro país ilegalmente y violas nuestras leyes, te perseguiremos, arrestaremos, deportaremos y nunca regresarás”. Con este mensaje, el presidente Trump y la secretaria del DHS, Kristi Noem, dejaron en claro que su política migratoria buscará reforzar los mecanismos de deportación y control fronterizo.
Esta operación podría tener efectos duraderos en las comunidades latinas del Medio Oeste, donde Chicago concentra una de las mayores poblaciones migrantes de Estados Unidos. Analistas advierten que las políticas actuales del DHS podrían tensar las relaciones entre la comunidad inmigrante y las fuerzas del orden, afectando la confianza y la cooperación en casos de delitos locales o denuncias de abuso.
Asimismo, líderes locales han pedido revisar la estrategia federal, destacando que Illinois es un estado con múltiples ciudades santuario y con leyes diseñadas para proteger los derechos humanos de los migrantes. En respuesta, el gobierno federal ha advertido que continuará con las redadas, aun en jurisdicciones que se nieguen a colaborar con las autoridades migratorias.
La Operación Midway Blitz no solo ha reavivado el debate sobre el control fronterizo, sino también sobre la manera en que el discurso político influye en las políticas públicas. Mientras la administración Trump considera que las deportaciones masivas son una medida de seguridad nacional, sus detractores afirman que se trata de una estrategia electoral con un alto costo humano y social.
Por ahora, el futuro de miles de inmigrantes detenidos sigue siendo incierto. Según fuentes del propio ICE, la mayoría enfrenta procesos acelerados de deportación, mientras que otros esperan audiencias judiciales para apelar sus casos. Las organizaciones pro inmigrantes insisten en que estas detenciones masivas solo profundizan el miedo y la desconfianza dentro de las comunidades migrantes, que continúan viviendo entre la incertidumbre y el temor a ser separadas de sus familias.
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