9 DE DICIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. La esfera política y judicial de Honduras se ha encendido tras el llamado del fiscal general del Estado, Johel Zelaya, a ejecutar una orden de Captura de Juan Orlando Hernández (JOH) que data de 2023. Esta solicitud se produce apenas una semana después de que el expresidente hondureño fuera indultado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y saliera de una prisión estadounidense donde cumplía una condena de 45 años por narcotráfico. Zelaya instruyó a la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) y exhortó a los organismos de seguridad nacional y a la Interpol a proceder con la captura de Juan Orlando Hernández por delitos de lavado de activos y fraude.
Los Graves Delitos en Honduras que Impulsan la Captura de Juan Orlando Hernández
Los presuntos delitos que motivan la Captura de Juan Orlando Hernández en su país están ligados a un millonario desvío de fondos estatales. Según el fiscal general, Zelaya, estos recursos fueron desviados para financiar la campaña política del expresidente en 2013, un caso de corrupción que salpicó a exfuncionarios, exdiputados, empresarios y particulares. Zelaya fue enfático al señalar en la red social X: «Hemos sido lacerados por los tentáculos de la corrupción y por las redes criminales que han marcado profundamente la vida de nuestro país». Esta primera línea de investigación ya ha resultado en la captura de la exdirectora de la Dirección de Niñes, Adolescencia y Familia (DINAFA), Dulce María Villanueva Sánchez.
La controversia se agrava por el momento en que se anuncia la Captura de Juan Orlando Hernández. El expresidente, declarado culpable de narcotráfico en EE.UU. en junio de 2024, fue liberado el 1 de diciembre por un indulto presidencial de Donald Trump. Trump argumentó que JOH había sido «tratado con mucha dureza e injusticia». Curiosamente, el indulto se anunció a menos de 48 horas de que los hondureños acudieran a las urnas para elegir al sucesor de la presidenta Xiomara Castro. La solicitud de Zelaya de ejecutar la captura ahora pone en el centro la soberanía judicial de Honduras frente a una decisión de la Casa Blanca.
Un Indulto con Fuerte Matiz Electoral
El perdón otorgado por el presidente Trump al expresidente Hernández no solo generó controversia por el delito de narcotráfico imputado por fiscales estadounidenses —quienes acusaron a JOH de convertir a Honduras en un «narcoestado»—, sino que también tuvo un fuerte matiz electoral. El anuncio del indulto se realizó justo antes de las elecciones y vino acompañado del respaldo de Trump a Nasry «Tito» Asfura, el candidato del derechista Partido Nacional y sucesor político de Hernández. Este respaldo ha sido interpretado por muchos como una injerencia en el proceso democrático, dada la estrecha ventaja que Asfura mantiene sobre su principal contendor, Salvador Nasralla, en un escrutinio electoral que ha sido calificado de «manipulado» por la oposición.
La delicada situación política en Honduras se refleja en el apretado conteo de votos, que ha estado bloqueado y se reanudó recientemente, mostrando a Asfura con el 40,52% y a Nasralla con el 39,18%. La diferencia de apenas 40,000 votos ha llevado a Nasralla y al partido oficialista Libre a denunciar irregularidades. Mientras el oficialismo pide la anulación total de las elecciones y convoca a movilizaciones, la Captura de Juan Orlando Hernández por delitos de corrupción internos añade una capa de inestabilidad al ya complejo panorama electoral. El fiscal Zelaya insiste: «Nuestro compromiso es con la verdad y con la justicia».
Diferencia entre Extradición, Sentencia e Indulto
