
2 DE DICIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. Joaquín Guzmán López, uno de los hijos del convicto capo Joaquín «El Chapo» Guzmán Loera, ha dado un paso significativo en su proceso judicial en Estados Unidos al declararse culpable de varios cargos de narcotráfico. Este lunes, Guzmán López, también conocido como «El Güero Moreno», compareció ante el Tribunal Federal de Distrito de Chicago para ratificar su cambio de declaración, revirtiendo su postura inicial de inocencia. La fiscalía federal lo acusaba específicamente de dos cargos de conspiración relacionados con el tráfico de drogas y de participación en las actividades de una peligrosa organización criminal. Esta declaración de culpabilidad refuerza la ofensiva legal de Washington contra el liderazgo histórico del crimen organizado mexicano.
Declaración de Culpabilidad: La Caída de un «Chapito»
Joaquín Guzmán López es una figura clave dentro de la facción conocida como «Los Chapitos», el grupo de hermanos que ha estado disputando el control del poderoso Cartel de Sinaloa desde que su padre fue sentenciado en 2019. Junto a su hermano Ovidio Guzmán López, alias «El Ratón» (quien también se declaró culpable de cargos similares en julio de este año), Joaquín era uno de los cabecillas de esta nueva generación de narcotráfico. Su declaración de culpabilidad en Illinois sigue un patrón de éxito para las autoridades estadounidenses en su objetivo de desmantelar a la jerarquía del Cartel, incluso después de la caída de su líder fundador, «El Chapo».

La detención de Guzmán López, ocurrida en circunstancias bastante inusuales, marcó un doble golpe para el Cartel de Sinaloa. Fue capturado el 25 de julio de 2024 a su llegada a un aeropuerto cerca de El Paso, Texas, en un avión privado, y lo más notable es que venía acompañado de Ismael «El Mayo» Zambada, el otro líder histórico del Cartel junto a «El Chapo». Zambada, capturado simultáneamente, también se declaró culpable de cargos de narcotráfico en Nueva York y está a la espera de su sentencia. La defensa de Zambada ha alegado que fue llevado contra su voluntad por Guzmán López, un detalle que añade drama e intriga a la operación que descabezó a las dos facciones más importantes del Cartel de Sinaloa en un solo día.
La Declaración de Culpabilidad en Medio de una Guerra Interna
La ausencia de los líderes tras esta doble captura ha tenido consecuencias inmediatas y violentas en México. Las facciones rivales, «Los Chapitos» y «Los Mayos», se han enfrascado en una brutal guerra interna en el estado de Sinaloa. Este conflicto por el control de las rutas de narcotráfico y los territorios ha dejado un saldo de cientos de muertos, tanto combatientes de ambos bandos como víctimas civiles inocentes. La declaración de culpabilidad de Joaquín Guzmán López se produce mientras sus otros dos hermanos, Iván Archivaldo Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, siguen prófugos y son buscados activamente por Estados Unidos, lo que sugiere que la violencia por la sucesión del Cartel no cesará pronto.
El proceso judicial contra Joaquín Guzmán López y su declaración de culpabilidad son el resultado de la intensa cooperación binacional y la prioridad que el gobierno de EE. UU. le ha dado a la extradición y enjuiciamiento de los herederos del Cartel de Sinaloa. Al declararse culpable, Guzmán López evita un largo juicio federal y probablemente busca negociar una pena menor, una táctica común en casos de alto perfil de narcotráfico. Sin embargo, su aceptación de los cargos de conspiración por tráfico de drogas y participación criminal consolida la narrativa de Washington sobre el desmantelamiento de la organización criminal.








