
MORELIA.- Un lamentable suceso conmocionó a la capital michoacana, luego de que empleados del Hotel Campestre Torreblanca, ubicado en la colonia Jardines de Torremolinos, descubrieran los cuerpos de dos menores de edad en el interior de una habitación.
El hallazgo se registró el martes 17 de junio, cuando el personal ingresó a la habitación 132 tras detectar un olor fétido y notar que la huésped no había realizado el pago ni el check-out.
Los menores, un niño de 10 años y una niña de 12, se encontraban cubiertos con una sábana, tendidos sobre la cama y en avanzado estado de descomposición, lo que sugiere que llevaban varios días fallecidos.
La madre principal sospechosa
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán informó que la madre, identificada como Ana Cecilia F., de 37 años, llegó con sus hijos al hotel el viernes 13 de junio.
De acuerdo con las indagatorias, presuntamente les suministró una sustancia para dormirlos y posteriormente los asfixió, al parecer utilizando una almohada.
Tras los hechos, la mujer solicitó al personal del hotel que no interrumpieran con el servicio de limpieza y luego abandonó el lugar.
Días después fue localizada en otro hotel de la ciudad, con heridas graves en los brazos, aparentemente tras intentar quitarse la vida. Actualmente permanece hospitalizada bajo custodia policial.
Fiscalía continúa con las investigaciones
La FGE abrió una carpeta de investigación, mientras se realizan diligencias para esclarecer las causas que llevaron a la mujer a tomar esta trágica decisión.
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Se sabe que la familia salió de su domicilio en Huecorio, municipio de Pátzcuaro, aunque hasta el momento se desconocen los motivos que desencadenaron el crimen.
Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) para la necropsia de ley, la cual determinará la causa y fecha aproximada del fallecimiento.
Las autoridades trabajan en la localización de los familiares para llevar a cabo la identificación oficial de los menores y coordinar el traslado de los restos a su lugar de origen.
Madre está bajo vigilancia policial
La madre continúa recibiendo atención médica bajo resguardo de elementos de seguridad, en espera de su recuperación para ser puesta a disposición del Ministerio Público.
Es realmente triste lo que pasó. No se puede entender cómo algo así puede suceder, especialmente con niños. La seguridad en estos lugares debería ser prioridad, y es preocupante que no haya mecanismos más efectivos para evitar tragedias como esta.
Es muy triste lo que pasó, y es una pena que sucedan cosas así en lugares que deberían ser seguros. La vida de esos niños se perdió de una manera horrible, y es un recordatorio de que debemos estar más atentos a lo que pasa a nuestro alrededor.