
10 NOVIEMBRE 2025-NACIONAL-El Gobierno de Michoacán anunció una inversión de 2 mil 700 millones de pesos como parte del Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, una estrategia que busca atender las causas de la violencia y fortalecer la seguridad, el desarrollo social y la reconstrucción del tejido comunitario. De acuerdo con el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, los recursos se destinarán a programas en materia de seguridad, juventud, cultura, turismo, salud, apoyo al campo e infraestructura, marcando una nueva etapa de colaboración entre los gobiernos estatal y federal.
Durante la presentación del plan en Palacio Nacional, encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el mandatario michoacano destacó que “hay indignación, sí, y es totalmente válida”, pero confió en que con el compromiso y sensibilidad de la Presidenta, Michoacán volverá a confiar. La declaración surge en un contexto marcado por el reciente asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, hecho que ha provocado dolor y movilizaciones ciudadanas en la entidad.
Compromiso con las víctimas y la justicia
Ramírez Bedolla expresó que las protestas surgidas tras la muerte de Manzo son “un grito legítimo de dolor, pero también un punto de partida”. Reconoció la sensibilidad y el humanismo del gobierno federal ante la tragedia, y agradeció el respaldo mostrado hacia la población michoacana, que, dijo, “se siente cobijada por la solidaridad de la Presidenta”.
El gobernador también compartió un testimonio personal al recordar el asesinato de su padre hace casi 40 años, en el mismo municipio de Uruapan, lo que añadió un tono profundamente humano a su mensaje. “Entiendo más de lo que creen la huella de la violencia”, expresó, al subrayar que la verdadera manera de sanar no es con más violencia, sino con justicia, empatía y políticas que atiendan las raíces del conflicto.

Ramírez Bedolla señaló que Michoacán ha sido víctima de “las estrategias más atroces y sangrientas” que, lejos de resolver el problema, “solo han logrado sembrar más violencia y dolor”. En clara alusión a la llamada “guerra contra el narcotráfico” iniciada durante el sexenio de Felipe Calderón, destacó que el nuevo enfoque del Plan de Paz busca romper ese ciclo de enfrentamiento, apostando por la prevención y el desarrollo social.
El mandatario reiteró su compromiso con la comunidad de Uruapan y con la familia de Carlos Manzo. Aseguró que continuará los proyectos que ambos impulsaron para el municipio y subrayó que la paz no se decreta, sino que se construye con la participación activa de la sociedad civil, el gobierno y los sectores productivos.
El Plan Michoacán por la Paz y la Justicia también incluye un componente de reconstrucción económica, con incentivos para atraer inversión privada, promover el turismo responsable y fortalecer las cadenas productivas del campo michoacano. De esta manera, se busca no solo reducir la violencia, sino también ofrecer alternativas reales a los jóvenes y generar empleo en regiones afectadas por el crimen organizado.









