BERLÍN, Alemania.— Este martes, el canciller alemán, Olaf Scholz, se mostró convencido de que queda margen de maniobra para alcanzar un acuerdo en materia de política económica dentro de la coalición pese a las diferencias por las que el jefe del Gobierno germano mantiene reuniones con sus socios para evitar una ruptura.
“Está claro que hay opciones para actuar. El ministro de Economía ha propuesto una y ésta y otras demuestran que, si se quiere, se puede llegar a un acuerdo“, dijo Scholz durante una rueda de prensa con el presidente de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud.
Scholz se refería así a la disposición de su titular de Economía y Protección Climática, el verde Robert Habeck, de ceder al presupuesto federal del año que viene los diez millones de euros procedentes del Fondo para el Clima y la Transformación que iban a ser destinados a una nueva planta de microprocesadores en Magdeburgo (este), cuya construcción ha congelado el fabricante estadounidense Intel.
En cuanto a las “diversas propuestas que son de dominio público“, Scholz agregó que es bueno que se aborden en consultas entre las partes.
El jefe del Gobierno alemán aludía así a las diversas reuniones a tres bandas entre el canciller, el vicecanciller Habeck, y el ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, celebradas en los últimos días.
Esta mañana, Scholz mantuvo con sus dos ministros la segunda conversación de esta semana tras un primer encuentro a tres bandas ya el pasado viernes y antes de la reunión regular el miércoles por la tarde de las cúpulas de los partidos del Gobierno, que incluye a los líderes de los tres partidos y de sus respectivos grupos parlamentarios.
“Cambio de rumbo económico”
Además, el domingo por la noche, el canciller se reunió a solas con el líder de los liberales, quien desató una crisis cuando envió el jueves a sus socios una propuesta para un “cambio de rumbo económico” que contiene medidas inasumibles para Los Verdes y los socialdemócratas de Scholz.
El canciller también subrayó este martes que en lo que respecta al trabajo en adelante del Ejecutivo, “se trata de estar comprometido con el país“, y no de cuestiones ideológicas.
En este sentido, Scholz subrayó que en las conversaciones que mantienen actualmente las partes sobre el presupuesto, sobre la economía, sobre trabajo, sobre la industria y demás temas importantes, lo que debe estar en primer plano es “avanzar juntos”.
“En este sentido, la cuestión no es si se puede conseguir, sino que es posible” y “es en lo que todo el mundo tiene que trabajar ahora“, razón por la cual ha garantizado que haya tiempo suficiente para conversaciones, según Scholz.
En el documento de Lindner, que no ha sido bien recibido por sus socios de coalición y que el líder de los liberales pone como condición para la permanencia de su partido en el Gobierno alemán, el ministro de Finanzas pide una reducción del impuesto de sociedades, una relajación de la normativa climática y una reducción de las subvenciones y prestaciones sociales.
El canciller alemán, Olaf Scholz, dice que todavía hay esperanza para llegar a un acuerdo con sus socios y evitar una ruptura. ¡Qué sorpresa! Otro político tratando de salvar su imagen y mantenerse en el poder. ¿Realmente creemos que están preocupados por el bienestar del país? Bueno, al menos nos dan algo de entretenimiento con sus peleas y negociaciones. ¡Vamos, chicos, sigan así!
El canciller alemán, Olaf Scholz, dice que aún hay esperanza de llegar a un acuerdo con sus socios. Seguro, solo necesitan discutir un poco más y todo se resolverá. ¡Buena suerte con eso!
El canciller alemán cree que aún se puede llegar a un acuerdo en política económica con sus socios. ¡Menos mal! Porque si no, se iba a armar un buen lío en el gobierno alemán. A ver si logran ponerse de acuerdo y evitar problemas.