
Durante la visita oficial del presidente Kasym-Yomart Tokáyev a Moscú, Rusia y Kazajistán firmaron un acuerdo inédito para el traslado de tigres de Amur, una de las especies más raras del planeta, incluidas en la Lista Roja Internacional. Este pacto, rubricado por los ministros de Ecología y Recursos Naturales de ambos países, busca fortalecer la cooperación ambiental y consolidar la relación bilateral.
Actualmente, Rusia alberga cerca de 750 ejemplares de tigres de Amur, considerados un símbolo de conservación exitosa. Con este convenio, Kazajistán busca reintroducirlos en su territorio como parte de un programa iniciado en 2018 para restaurar la fauna autóctona de sus regiones orientales.
El presidente ruso, Vladímir Putin, destacó que este proyecto refleja la “amistad y alianza práctica” entre ambas naciones, que ahora elevan sus relaciones al nivel de asociación estratégica integral. Tokáyev, por su parte, subrayó que el acuerdo representa no solo un avance ecológico, sino también un paso firme hacia la cooperación científica y la protección del patrimonio natural compartido.
El proyecto contempla el traslado de varios ejemplares en etapas controladas y bajo estrictos protocolos veterinarios, asegurando su adaptación y bienestar en el nuevo hábitat. Además, se desarrollarán programas conjuntos de monitoreo, capacitación y educación ambiental.








