ACAPULCO.— El huracán Erick tocó tierra firme en Oaxaca, el jueves temprano como un huracán de categoría 3. Posteriormente, se movió tierra adentro y se debilitó mientras descargaba fuertes lluvias, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).
El centro del huracán se encontraba a unos 60 kilómetros (35 millas) al norte-noreste de Acapulco el jueves por la tarde. Sus vientos máximos sostenidos eran de 85 kilómetros por hora (50 millas por hora), y se movía hacia el noroeste a 19 km/h (12 mph), según el NHC, con sede en Miami.
La tormenta mantiene su avance por tierra, generando afectaciones en Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Puebla y Chiapas, sin que hasta ahora se reporten pérdidas humanas.
#Erick ahora como #TormentaTropical sobre el estado de #Guerrero.
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— CONAGUA Clima (@conagua_clima) June 19, 2025
Antes de tocar tierra firme, Erick se debilitó de una poderosa categoría 4 a una categoría 3. La tormenta pasó entre los destinos turísticos de Acapulco y Puerto Escondido, impactando una franja de la costa mexicana escasamente poblada cerca de los límites entre Oaxaca y Guerrero. Campos agrícolas cubren la zona costera entre pequeños pueblos pesqueros.
Se pronosticaba que Erick se debilitara rápidamente al chocar con las montañas de la costa del sur de México, y es probable que el sistema se disipe en las próximas horas, de acuerdo con el NHC.
El paso de Erick por Guerrero
El jueves, Acapulco despertó bajo ominosas nubes oscuras. La lluvia comenzó más tarde en la mañana con la llegada de vientos más fuertes. Había poco tráfico en las calles. Algunos residentes compraban insumos en las pocas tiendas abiertas, mientras que los pescadores se dirigieron a la orilla para revisar sus botes y algunas personas aprovecharon la calma para nadar un poco.
Sin embargo, hacia el mediodía la tormenta se movió hacia el noroeste justo tierra adentro a lo largo de la costa, llevando fuertes lluvias al balneario y a las montañas que se elevan dramáticamente sobre él.
Aun así, parecía que Acapulco había esquivado lo peor de la tormenta, al menos en términos de los fuertes vientos de Erick.
Es preocupante cómo los huracanes siguen afectando nuestras costas. Aunque Erick se debilitó, las lluvias intensas pueden causar muchos problemas, como inundaciones y deslizamientos. Es un recordatorio de que necesitamos estar mejor preparados para estos fenómenos.
Es preocupante ver cómo estos fenómenos naturales se están volviendo más frecuentes y potentes. La gente en Guerrero y Oaxaca necesita apoyo y recursos para enfrentar las consecuencias de la tormenta. Es clave que las autoridades actúen rápido y ayuden a las comunidades afectadas.