La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó su profunda preocupación e indignación ante una exposición artística presentada en la Academia de San Carlos, en Ciudad de México, que consideran ofensiva para la fe católica.
A través de un comunicado, los obispos subrayaron que el arte debe ser un vehículo de encuentro y diálogo, y no una herramienta de burla o desprecio hacia las y no una herramienta de burla o desprecio hacia las creencias de cualquier comunidad.
“Nos duele y preocupa cuando el arte se utiliza para herir la sensibilidad y los símbolos sagrados de cualquier comunidad, pues esto no construye puentes sino que profundiza las divisiones en nuestra sociedad”.
También hicieron un llamado a la reflexión sobre el verdadero poder transformador del arte.
Con ocasión del Jubileo de los artistas y la cultura que está convocado a realizarse en Roma del 15 al 18 de febrero, quisiéramos los obispos de México ofrecer una reflexión para todos los hombres y mujeres de buena voluntad que, buscando reflejar la belleza que experimentan en… pic.twitter.com/zaFF8qkTFI
— CEM (@IglesiaMexico) February 15, 2025
CEM rechaza exposición “La Venida del Señor” en CDMX
El CEM criticó las obras de arte que, “apelando a la libertad de expresión, usan la burla, el desprecio y la intolerancia hacia otros otros miembros de la comunidad”, haciendo énfasis a una exposición en CDMX.
La exposición “La Venida del Señor” en la Antigua Academia San Carlos de la CDMX “queda a deber mucho a la sociedad, pues el arte es novedad que busca construir el encuentro y alimentar la esperanza”.
“El auténtico arte no necesita profanar lo sagrado para ser provocador, su mayor provocación debe ser la apelación a lo más auténtico del ser humano, su dignidad, su trascendencia y su capacidad de construir un mundo mejor”.
Del artista Fabián Cháirez, “La Venida del Señor” muestra escenas homoeróticas de figuras de la fe católica.
Es interesante ver cómo el arte puede generar reacciones tan fuertes. Por un lado, es cierto que cada quien tiene derecho a expresar su fe y sus creencias, pero también hay que considerar que el arte puede incomodar y provocar debates. Tal vez sería bueno encontrar un equilibrio donde se respete la libertad de expresión sin ofender a los demás. Al final, todos tenemos diferentes perspectivas y eso es lo que hace que estas conversaciones sean importantes.
Es un poco preocupante ver cómo algunas expresiones artísticas generan tanto rechazo. El arte debería provocar reacciones, sí, pero también abrir espacios para el diálogo. En lugar de condenar, tal vez sería mejor si se intentara entender el mensaje detrás de la obra. Al final, todos tenemos diferentes formas de ver y vivir la fe.
Es un tema complicado, porque el arte siempre busca provocar y hacer pensar. Pero, por otro lado, entiendo que hay cosas que pueden herir sensibilidades. Tal vez un poco de respeto por las creencias de los demás no estaría mal, aunque también es cierto que la censura no es la respuesta. Al final, todo se reduce a encontrar un equilibrio entre la libertad de expresión y el respeto por la fe.