CIUDAD DE MÉXICO.— El lento crecimiento económico traerá consigo una menor generación de empleos formales, principalmente en la industria de la construcción, coincidieron analistas.
El Departamento de Estudios Económicos de Banamex proyecta 213 mil puestos nuevos adscritos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en 2025, el primer año completo de la gestión de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
De confirmarse esta expectativa, será el peor arranque de sexenio en empleo desde la administración de Vicente Fox.
La subdirectora de Estudios Económicos de Banamex, Guillermina Rodríguez, destacó la fuerte desaceleración de inversión pública en infraestructura, lo que afectó puestos en el sector construcción.
En 2023, las plazas formales en la construcción crecieron en promedio 8.4%, pero de enero a noviembre de 2024 aumentaron 2.5%.
“Se observan caídas importantes, sobre todo en Tabasco y Campeche, donde se generaba empleo, principalmente en obra pública que ya se están agotando”, expuso.
En la parte de las manufacturas, hizo ver que el crecimiento promedio de plazas formales fue solo de 0.3% entre enero y noviembre de 2024, tras expandirse 2.1% en 2023. “Este estancamiento en el empleo manufacturero se prolongará por algunos meses más”, previó.
En las actividades relacionadas con los servicios también proyectó una desaceleración de plazas adscritas al Seguro Social.
Por otra parte, la analista de Banamex destacó que el empleo formal agrícola también muestra datos bastante negativos, puesto que de enero a noviembre tiene una caída promedio de 2.5%, y aunque su participación es pequeña, afecta a estados como Sinaloa y Sonora, donde se tienen el mayor número de registros en este sector.
Economía formal
Guillermina Rodríguez subrayó la vinculación que tiene el empleo con la actividad económica, que prácticamente se va a estancar en 2025, debido a que calcula que el Producto Interno Bruto (PIB) avanzará solo 0.2%.
En su opinión, la baja generación de plazas es un fenómeno multifactorial, por lo que se sumarían problemas que han mencionado algunos empresarios consultados por el Banco de México (Banxico), como la inseguridad pública y la competencia de productos de origen asiático, dado que estos elementos inciden en las decisiones de empleadores.
Para el analista de BBVA Research, David Cervantes, el debilitamiento de la generación de empleos formales puede estar asociado al alza de la incertidumbre por factores idiosincráticos, como la reforma judicial, y globales, ante los riesgos derivados del resultado de las elecciones en Estados Unidos. Este último factor seguirá generando incertidumbre debido a las medidas que pueda adoptar el nuevo gobierno de Donald Trump, lo que continuará impactando negativamente en la creación de empleos, agregó el especialista.
El mercado laboral fue perdiendo fuerza a lo largo de 2024, al crear 619 mil puestos entre enero y noviembre, de acuerdo con la información más reciente sobre las plazas adscritas al Seguro Social.
Esta cifra se encuentra 40.2% por debajo del millón de empleos nuevos reportados en el mismo periodo de 2023 y además se trata del peor resultado desde 2020, cuando fue la pandemia.
El experto de BBVA Research estimó un menor ritmo de creación de empleos en 2024, cuya desaceleración se acentuará hacia el cierre del año. Sin embargo, “la tendencia no sólo se ha confirmado con los resultados observados, sino que ha sido incluso más marcada de la que preveíamos”.
Tomando en cuenta que en diciembre de cada año se pierden alrededor de 300 mil plazas formales, debido al recorte estacional de personal, es probable que los empleos creados en todo 2024 sumen unos 319 mil.
Hace un año, los 37 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero encuestados por Banxico anticipaban la generación de 600 mil empleos formales durante 2024, la misma cifra que esperaban para 2025.
El consenso también pronosticaba entonces que la economía nacional crecería 2.4% en 2024 y 1.9% durante el año que recién comenzó.
El peso, en su peor año
Bajo las fuerzas de la oferta y demanda, el peso rompió la racha positiva este año después de estar entre las monedas más ganadoras en 2022 y 2023.
Lo anterior responde a varios eventos, como la aprobación de reformas constitucionales, la diferencia de tasas de interés entre México y otros países, y la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales en Estados Unidos, según opinaron analistas.
La moneda nacional cerró el año en 20.83 unidades por dólar en operaciones al mayoreo, de las cuales 82% se realizan en el extranjero, indica la última encuesta del Banco de Pagos Internacionales.
La divisa mexicana acumuló una depreciación de 22.9% o 3.88 pesos en comparación con el nivel de 16.95 que tenía al acabar 2023, de acuerdo con los registros de Bloomberg.
La última vez que el peso perdió tanto terreno fue en 2008, cuando estalló la crisis de las hipotecas en Estados Unidos y la paridad se depreció 25.3%.
