NUEVA YORK.- El narcotraficante mexicano Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cartel de Sinaloa, volverá el miércoles al tribunal federal de Nueva York donde se le acusa de 17 cargos para una audiencia en la que se dirimirá un potencial conflicto de interés del abogado del capo, quien también representa a uno de sus hijos.
Mientras tanto, “Los Chapitos“, Joaquín y Ovidio Guzmán López, hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, continúan negociando un acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía federal de Estados Unidos, tal como trascendió una semana atrás en una vista celebrada en una corte de Chicago.
Tras dos audiencias -una en septiembre y otra en octubre- en Nueva York, y después de que la fecha fuera modificada en un par de ocasiones, Zambada vuelve mañana al tribunal donde, entre otros cargos, se le acusa de conspiración para asesinato, narcotráfico, pertenencia a empresa criminal y posesión de armas.
El caso en Nueva York contra El Mayo, prófugo de la justicia durante más de cuatro décadas y por cuya captura Estados Unidos ofrecía 15 millones de dólares, fue actualizado en febrero y es el único que menciona el tráfico de fentanilo, el potente opioide que ha generado una crisis de muertes por sobredosis en Estados Unidos.
Así, Zambada podría afrontar la pena de muerte, pese a que la abolieron en el estado de Nueva York en 2004, si el Gobierno considera que con su papel crucial en el Cartel de Sinaloa, actor principal en la crisis de sobredosis por fentanilo en EE.UU., incurrió en delitos federales tan graves como asesinatos en masa o crímenes por terrorismo recurrían a ella.
Potencial conflicto de intereses
Sin embargo, en la sesión de este miércoles lo que se espera principalmente es que el juez encargado Brian M. Cogan se pronuncie sobre la petición de la Fiscalía para que revise un “potencial conflicto de intereses” por parte del abogado principal de “El Mayo”, Frank Pérez.
Y es que este letrado también representa al hijo del propio capo, Vicente Zambada Niebla alias Vicentillo, quien se ha desempeñado como colaborador activo de Estados Unidos.
En octubre, Cogan, que condenó a cadena perpetua a El Chapo en 2019 y a 38 años al exsecretario de Seguridad Pública mexicano Genaro García meses atrás, pidió “tiempo” para investigar esta posible incompatibilidad debido a la enjundia de la acusación: “Esto sería algo muy serio e importante, no puedo resolverlo en apenas dos días”, afirmó entonces el magistrado.
“Específicamente, los deberes del señor Pérez de lealtad y confidencialidad hacia su cliente podrían impedirle asesorar al acusado sobre estrategias de defensa viables y representarlo vigorosamente y diligentemente tanto en la etapa previa al juicio como en el proceso”, habían detallado antes los fiscales en su solicitud.
Además, la audiencia podría definir nuevas fechas del proceso abierto contra Zambada en Nueva York y hasta un posible cambio de postura del capo, que se declaró no culpable en septiembre de los 17 cargos de los que se le acusa.