
15-Agosto-2025.-Sudáfrica enfrenta una nueva tormenta política y diplomática luego de que el jefe del Ejército de Sudáfrica, general Rudzani Maphwanya, fuera acusado de “imprudente” tras expresar respaldo militar y político a Irán durante una visita oficial. El propio presidente Cyril Ramaphosa calificó la gira de “mal aconsejada” y anunció que se reunirá con el general para exigir explicaciones.
La controversia surge en un momento en que Sudáfrica mantiene relaciones tensas con Estados Unidos, que ha cuestionado los lazos de Pretoria con Teherán. Durante su encuentro con autoridades iraníes, Maphwanya aseguró que ambos países comparten “metas comunes” y que siempre estarán “del lado de los pueblos oprimidos y desprotegidos”. También criticó a Israel por la guerra en Gaza y reiteró apoyo a la causa palestina, asegurando que su visita llevaba “un mensaje político” de la administración Ramaphosa.
Sin embargo, el gobierno sudafricano se ha distanciado de estas afirmaciones. El Ministerio de Defensa las calificó de “lamentables”, mientras que el Ministerio de Relaciones Exteriores aclaró que no representan la postura oficial de política exterior. Incluso la Presidencia afirmó que Ramaphosa no estaba al tanto de la visita ni la había autorizado, lo que agrava la polémica interna.
El partido Alianza Democrática, que forma parte del gobierno, fue más allá y pidió que el general sea sometido a un consejo de guerra. La organización señaló que sus declaraciones excedieron el ámbito militar y entraron en un terreno reservado exclusivamente a la diplomacia estatal, poniendo en riesgo la posición internacional del país.
Las tensiones con Estados Unidos no son nuevas. El expresidente Donald Trump ya había cortado ayuda a Sudáfrica acusando al gobierno de “reavivar” relaciones con Irán, a quien Washington considera un enemigo estratégico. Además, criticó a Pretoria por demandar a Israel ante la Corte Internacional de Justicia por presunto genocidio y lanzó afirmaciones infundadas sobre persecución a la población blanca.