
11 de Julio del 2025.- La mañana de este viernes, un ataque con dron dirigido contra la estación de policía de Uriangato, Guanajuato, puso en evidencia la creciente sofisticación con la que operan ciertos grupos delictivos en el estado. El ataque ocurrió alrededor de las 08:14 horas, justo cuando el personal policial realizaba su pase de lista en las instalaciones ubicadas sobre la avenida Juan Pablo II, en la colonia Lázaro Cárdenas.
De acuerdo con el comunicado oficial del gobierno municipal, encabezado por el alcalde del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Juan Carlos Martínez Calderón, el dron sobrevoló el área y liberó un artefacto explosivo de bajo poder. Afortunadamente, no se reportaron lesionados ni víctimas mortales. Pese a que el ataque no causó daños significativos, fue considerado una señal preocupante de violencia dirigida a las autoridades locales.
Ante este hecho, las autoridades activaron los protocolos correspondientes y solicitaron apoyo inmediato de fuerzas estatales y federales. Al lugar acudieron elementos de la Guardia Nacional, del Ejército Mexicano y de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado. La respuesta coordinada refleja el nivel de seriedad con el que se está abordando el incidente, aunque persisten dudas sobre la capacidad operativa de los grupos que estarían detrás del ataque.
La Secretaría de Seguridad y Paz del municipio reafirmó su compromiso con la población e informó que se está realizando un análisis exhaustivo de lo ocurrido. Se indicó que ya se encuentra en curso una investigación con el objetivo de identificar a los responsables y prevenir futuros incidentes de esta naturaleza. El gobierno hizo un llamado a la ciudadanía para denunciar cualquier actividad sospechosa de manera anónima al número 089.
Este tipo de ataques no son aislados en Guanajuato. En los últimos dos años, al menos cuatro eventos similares con drones explosivos han sido registrados en municipios del mismo estado, lo cual apunta a una tendencia en la adopción de tecnología por parte del crimen organizado. Analistas en seguridad advierten que estas acciones representan un cambio en los métodos de intimidación y agresión contra las fuerzas de seguridad. La falta de una estrategia estatal clara ante el uso de drones en actos delictivos pone en entredicho la capacidad de contención ante una amenaza que evoluciona rápidamente.