
El legendario lanzador Pedro Martínez no se anda con rodeos: los Dodgers son el rival a vencer en esta postemporada de la MLB. A través de su cuenta en la red social X, Martínez destacó que el equipo angelino cuenta con una combinación mortal: todos sus jugadores están en forma, tienen poder en el bateo y su profundidad ofensiva los convierte en impredecibles. “Es como la ‘boa’ que mencioné: nunca se sabe cuándo va a picar”, comentó el dominicano, refiriéndose a que cualquier nombre puede provocar daño (Ohtani, Betts, Muncy o Hernández).
Para reforzar su argumento, Martínez puso de ejemplo que el equipo tiene múltiples amenazas ofensivas que puede aparecer en cualquier momento, lo que dificulta planear estrategias defensivas o de pitcheo contra ellos. Esa versatilidad los torna más peligrosos que equipos con un solo bateo explosivo, pues los rivales no pueden concentrarse en neutralizar a una sola figura.
En el terreno, los Dodgers ya han demostrado que no son solo palabras: tienen ventaja en la Serie Divisional. Luego de vencer 4‑3 a los Phillies en el Juego 2, se colocaron 2‑0 en la serie con firmeza, mostrando dominio tanto en ofensiva como en pitcheo abridor. Esta solidez hace que otros equipos vean a Los Ángeles como el obstáculo más difícil para llegar a las instancias finales.
Pero no todo es perfecto para los Dodgers. En esta temporada han lidiado con una carga notable de lesiones. Según reportes de ESPN, han enviado a 29 peloteros a la lista de lesionados, el número más alto en la Liga Nacional, incluidos figuras clave como Freddie Freeman y varios brazos del bullpen. Eso podría mermar su efectividad si la fatiga o la baja producción afecta a sus piezas más usadas en lo que resta del torneo.
Fortalezas y amenazas reales
Los Dodgers han combinado una rotación abridora de lujo —con lanzadores como Blake Snell, Yoshinobu Yamamoto y Shohei Ohtani— con una alineación profundamente amenazante. Pero detrás de esa fortaleza aparece la debilidad: el bullpen ha sido cuestionado tanto por lesiones como por inconsistencias. Esto les puede costar caro, especialmente en series largas donde los relevistas deben responder noche tras noche.
Un dato adicional que complementa la visión de Martínez: históricamente, los equipos dominantes en producción ofensiva y profundidad tienden a tener ventaja en postemporada, pues pueden sobreponerse a bajones en alguna serie. Sin embargo, si el bullpen falla en momentos clave, esa ventaja puede perderse rápidamente. En ese sentido, los Dodgers tienen la responsabilidad de equilibrar el poder ofensivo con un relevo confiable para aspirar al título.