
22 de Agosto 2025.- El Gobierno de Veracruz ofreció una disculpa pública por la desaparición forzada de ocho elementos de la policía municipal de Úrsulo Galván, un hecho que marcó a la comunidad y a las familias afectadas desde 2013. El acto fue encabezado por el secretario de Gobierno, Ricardo Ahued, y el titular de Seguridad Pública, Alfonso Reyes, quienes reconocieron la responsabilidad del Estado en estos lamentables sucesos.
Reconocimiento oficial y reparación del daño
La disculpa deriva de la recomendación 24VG/2019 emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que contempló como parte de las acciones la reparación integral del daño. Ahued señaló que, aunque los hechos ocurrieron durante la administración de Javier Duarte (2010-2016), el gobierno actual debe asumir su obligación de atender y reconocer estas violaciones a los derechos humanos.
“Ofrezco nuestra más sincera disculpa por el dolor, la incertidumbre y la angustia que han padecido ante la ausencia de sus familiares, ha sido un hecho devastador en sus vidas”, expresó el funcionario. Además, subrayó la importancia de redoblar esfuerzos para eliminar estas prácticas dentro del gobierno y garantizar que no se repitan.
Familias aún sin respuestas
El secretario Ahued recordó que un número significativo de familias sigue desconociendo el paradero de sus seres queridos. Este reconocimiento abre la puerta a acciones concretas de búsqueda, asistencia psicológica y acompañamiento legal para los afectados, reforzando la obligación del Estado de proteger a sus ciudadanos y mantener la memoria de los hechos.
El 11 de enero de 2013, los policías Alejandro Báez Hernández, Agustín Rivera Bonastre, Aureliano Sánchez Tonil, Guillermo Torres Perdomo, Javier Araus Molina, Juan Carlos Montero Parra, Luis Alberto Valenzuela González y Samuel Montiel Perdomo salieron del palacio municipal luego de haber pasado lista. Durante su recorrido fueron interceptados por 15 elementos del denominado Grupo Tajín, dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública.
Búsqueda y justicia pendientes
A pesar de las protestas y reclamos constantes de los familiares, hasta ahora se desconoce el paradero de los policías. Esto evidencia la necesidad de fortalecer los mecanismos de investigación y de protección a las víctimas de desapariciones, así como de garantizar transparencia y rendición de cuentas en casos de violaciones graves a los derechos humanos.