
CIUDAD DE MÉXICO.- En el marco de encendido debate, la Cámara de Diputados aprobó en lo general nueva Ley de la Guardia Nacional que, de avanzar, marcaría un giro histórico, pues la GN se transformaría en Fuerza Armada Permanente bajo control de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Asimismo, la medida permitiría que militares accedan a cargos civiles mediante licencias especiales.
Advierten militarización y espionaje de la vida pública del país
Por ese motivo, diputados de oposición acusaron que la reforma legal implica la militarización de la vida pública del país y abre la puerta al uso político de la Guardia Nacional.
Con mociones rechazadas y advertencias sobre el posible espionaje ciudadano, el tema escala como una de las discusiones más tensas del actual sexenio.
Este martes, la Cámara de Diputados aprobó en lo general, con 349 votos a favor, de Morena, PVEM y PT, y 132 en contra, del PAN, PRI y MC, expedir una nueva Ley de la Guardia Nacional para quitarle el carácter civil al cuerpo policiaco.
Licencia especial para que militares ocupen cargos públicos
Pretende convertirla en Fuerza Armada Permanente dependiente de la Secretaría de la Defensa Nacional y conceder licencias a los militares para que ocupen cargos de elección popular o puestos en cualquiera de los tres órdenes de gobierno.
Establece que el titular del Ejecutivo otorgará la licencia especial para que el personal militar de la Guardia Nacional desempeñe cargos de elección popular, o actividades o empleos civiles en dependencias del Ejecutivo, gobiernos estatales, municipales, organismos descentralizados o empresas de participación estatal y otras dependencias públicas.
“Cuando no esté fijado el plazo (de la licencia especial), la Secretaría (de Defensa Nacional) dará por terminada la licencia del personal militar integrante de la Guardia Nacional al concluir el mandato constitucional de la persona titular del Ejecutivo Federal de quien emanó la orden”, especifica el dictamen.
Elías Lixa ve laguna en la nueva Ley de la Guardia Nacional
Elías Lixa, coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), aseguró que existe una laguna en la nueva Ley de la Guardia Nacional, ya que los requisitos de las licencias para que un militar pueda acceder a un cargo de elección popular están en la Constitución.
“Para ser presidente de la República los requisitos están, no para contender, para ser presidente de la República y para ser legislador federal los requisitos están establecidos en el artículo 82 y 55 de la Constitución, respectivamente”.
“Para las gubernaturas de estados, están en cada Constitución. Pero, hombre, yo no voy a ser iluso, así como cambien cualquier norma para poder hacer lo que quieran, porque lo único que falta es que borren la Constitución y pongan lo que quiera el oficialismo, pues lo pueden hacer en cualquier momento y salirse con la suya con cualquier fechoría“, añadió.
Los diputados de la oposición acusaron la militarización de la seguridad pública y el fin del Estado civil mexicano.
Nueva Ley de la GN: riesgo de que el gobierno espíe a opositores
Además, advirtieron del peligro de que el gobierno federal utilice a la GN para espiar a quienes estén en contra de las políticas del gobierno.
La diputada Laura Ballesteros, de Movimiento Ciudadano (MC), presentó una moción suspensiva por considerar que las reformas contenidas en el dictamen “consolidan la militarización de la seguridad pública del país, y no solo eso, consolidan la militarización de la vida pública de México”.
La moción fue desechada por Morena y sus aliados en votación a mano alzada, de modo que la legisladora emecista anticipó que su bancada presentará un amparo en cuanto termine el proceso legislativo en el Congreso de la Unión.
“Ahora le abren la puerta para que los militares de la Guardia Nacional, no solo se postulen a cargos de elección popular, sino que puedan desempeñar también cargos en los tres niveles de gobierno”.
Señalan que nueva ley marca el fin del Estado civil en México
“Este es el fin del Estado civil mexicano… militarizar la vida pública del país es ya otro horizonte que ni el PRI se hubiera atrevido en sus mejores momentos“, dijo en tribuna.
Por su parte, el diputado Ricardo Mejía Berdeja (PT) afirmó que la extinta Policía Federal también se constituyó con integrante del Ejército y la Marina, al igual que la Guardia Nacional, pero no hubo protestas de la oposición.
“La extinta Policía Federal fue creada en 1999, con Ernesto Zedillo, y esta policía se integró con elementos del Ejército, de la Marina y de la Policía Federal de Caminos, pero el grueso de sus elementos fueron del Ejército y de la Marina, por eso llama la atención que descalifiquen la participación de nuestras Fuerzas Armadas. Ahí no veíamos que se desgarraban las vestiduras”, expresó.
PAN llama “Ley Espía” a nueva Ley de la Guardia Nacional
El diputado Guillermo Anaya Llamas (PAN) refirió que la expedición de la nueva Ley de la Guardia Nacional está relacionada con la Ley General del Sistema de Seguridad Pública y la Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública, propuestas por el Ejecutivo, con la finalidad de espiar a la ciudadanía, por lo que la denominó “Ley Espía”.
“Si bien hay controles judiciales para la intervención telefónica en este dictamen, el día de mañana se va a presentar la Ley de Seguridad y la Ley de Inteligencia, y en estas reformas Morena pretende, amiga y amigo que nos escuchas, pretende que el gobierno pueda pedirle a las compañías telefónicas tu ubicación GPS en tiempo real, sin ninguna regla y sin ningún límite”, expuso.
El coordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rubén Moreira, aseguró que con las reformas en materia de seguridad y de telecomunicaciones, el gobierno federal busca espiar a la oposición, porque “Morena quiere una dictadura como nunca había visto este país”.
“Lo que dice la Ley de Telecomunicaciones, las autoridades en tiempo real pueden pedir la ubicación de cualquiera de nosotros, en tiempo real, ¿en base a qué?, al teléfono que traen ustedes”.
No me parece bien que los militares puedan ocupar cargos civiles. Eso podría afectar la democracia y hacer que se mezclen las funciones de seguridad con la política. Es un riesgo que no deberíamos correr.
No me parece bien que los militares puedan ocupar cargos civiles. Eso puede llevar a una falta de control y a que se mezclen los asuntos de seguridad con la política. Necesitamos que las fuerzas armadas se mantengan en su lugar y que los civiles manejen los asuntos del país.