
Un grupo de mexicanas en el Vaticano vivió un momento tan sorpresivo como especial al presenciar uno de los eventos más significativos de la Iglesia Católica. Aunque no lo esperaban, estar presentes en este punto de la historia eclesiástica lo describieron como “un gran regalo”. Su testimonio conmovió a muchos en redes sociales y medios.
Estas mujeres viajaron a Roma sin imaginar que serían testigos directos del anuncio del nuevo papa. Entre lágrimas, aplausos y emoción, aseguraron que se sintieron profundamente bendecidas de poder estar tan cerca del corazón de la fe católica justo en ese instante histórico. “Jamás pensamos vivir algo así”, dijo una de ellas.
“Es un gran regalo”, dicen mexicanas conmovidas en Roma

Algunas de las mexicanas en el Vaticano llevaban años soñando con visitar la Basílica de San Pedro, pero jamás imaginaron coincidir con el cónclave. Al ver la fumata blanca, muchas rompieron en llanto, entendiendo la magnitud del momento. Para ellas, no fue casualidad, sino una señal muy personal.
Además del anuncio papal, las mexicanas destacaron la hospitalidad y el ambiente de fraternidad entre peregrinos de todo el mundo. “Aunque no conocíamos a nadie, todos nos abrazaban y compartíamos la alegría. Fue algo que jamás vamos a olvidar”, comentaron emocionadas frente a las cámaras.
Testigos privilegiadas del anuncio papal
Para muchas, haber estado frente a la Capilla Sixtina justo cuando se dio la fumata fue “como un milagro”. Relataron que apenas unas horas antes estaban visitando otras iglesias, sin saber que el anuncio era inminente. Cuando el humo blanco apareció, corrieron entre la multitud para llegar a la plaza y vivir el momento.