Metallica es una de las bandas más grandes e importantes de la historia, eso no está en duda. Durante más de cuatro décadas de carrera y aunque algunos no estén de acuerdo, se han encargado de popularizar el metal y llevarlo a lugares inimaginables. Y eso en parte es gracias a los conciertos que dan por todo el planeta.
Para nadie es un secreto que uno de los fuertes de esta bandota son sus presentaciones en vivo, pues es única la presencia que tienen en el escenario, que se combina con la potente voz de James Hetfield, los rifados solos de Kirk Hammett y la brutal base rítmica conformada por Lars Ulrich y Robert Trujillo. Todo esto les ha ganado la reputación de ser uno de los mejores grupos de metal en directo.
Pero además de la potencia que tienen cuando se suben al escenario y rolas que nos hacen mover la cabeza, Metallica también han sido pioneros en la forma en que se hacen shows musicales, innovando en montaje y propuestas para darle un extra a sus fans. Es por eso que acá les contamos de la evolución de la banda en vivo y cómo han cambiado sus conciertos.
Las primeras giras y conciertos de Metallica
Para ser exactos, el primer concierto de Metallica fue el 14 de marzo de 1982, en el Radio City de Anaheim, California. A partir de ahí, comenzaron a ganar cierta fama en el circuito local de metal y poco a poco empezaron a ganarse más oportunidades para presentarse en vivo, en espacios más grandes.
Durante sus primeros años, la banda tocó en pequeños festivales y como teloneros en giras de bandas como Venom, Anthrax, Exodus, Raven y Tank (con quienes salieron de gira por primera vez a Europa en 1984. Sin embargo, un año después de eso, su nombre empezó a perfilarse en las grandes ligas en Estados Unidos.
En la gira de Ride the Lightning en 1985, Metallica compartió cartel con bandas como Bon Jovi, ZZ Top, Scorpions y Ratt. A pesar de estar en el mismo escenario que grupos muy importantes, James Hetfield y compañía sobresalieron por la energía pura e intensidad sonora que brindaban a quienes los veían en vivo. Y vaya que eso lo han mantenido hasta la fecha.
Entre 1986 y 1987, la banda se aventó una intensa gira llamada Damage, Inc. Tour para promocionar Master of Puppets, donde la primera parte se la pasaron teloneando a Ozzy Osbourne. Sin embargo, para el resto de las fechas, la agrupación se convirtió en el headliner y fue ahí donde demostraron que, más allá de tocar sus canciones, buscaban ofrecerle una experiencia a quienes se lanzaban a verlos en los shows.
‘Master of Puppets’ y el primer tour como headliner de la banda
Durante ese tour, Metallica usó un fondo que tenía la portada de Master of Puppets, aunque por ahí había unas cruces que sobresalían y hacían que la imagen de su tercer material discográfico tuviera más punch. A pesar de ser una producción muy “austera” –considerando las cosas que montan en la actualidad–, ese back era impresionante y visualmente le daba el poder que le faltaba a sus rolas en vivo.
En los siguientes dos años, la banda encabezó el tour de Monsters of Rock y para finales de la década, volvieron a armar una gira por su cuenta. Entre 1988 y 1989, James Hetfield, Lars Ulrich y Kirk Hammett junto a Jason Newsted (quien reemplazó a Cliff Burton tras su trágica muerte en 1986) armaron el Damaged Justice, una serie de presentaciones por el lanzamiento de …And Justice for All.
Fue en esa gira donde Metallica decidió apostar por una puesta en escena que los hiciera sobresalir a los demás. Y vaya que le atinaron, pues utilizaron una escenografía impactante que incluía a la famosa dama de la justicia atada y con grietas que aparece en la portada de su cuarto álbum de estudio, pilares caídos y estatuas dañadas de leones. Una cosa loquísima que dejó claro que a esas alturas de su carrera, ya estaban en otro nivel.
Para inicios de los 90, el grupo se aventó algunas fechas por festivales en Europa, tocaron junto a Aerosmith y The Black Crowes, y una vez más encabezaron el Monsters of Rock. Sin embargo, después de lo que hicieron en el Damaged Justice Tour, esto se quedaría corto en comparación con lo que la banda mostraría con su siguiente álbum de estudio.
La llegada del Snake Pit y sus primeros conciertos en México
En 1991, Metallica nos presentó el icónico Black Album, el disco con el que se convirtieron en estrellas mundiales. Para promocionarlo como se debía, armaron una enorme gira por todo el planeta que se llamó Wherever We May Roam Tour, para la cual apostar por montar un escenario que simplemente estaba a la altura de la banda.
Y es que no mentimos cuando decimos que este montaje revolucionó la forma en que se hacían conciertos de rock. Se trataba de un escenario formado por diferentes escaleras y rampas por las que James, Kirk y Jason se paseaban mientras tocaban. Aunque quizá lo más importante fue que en medio de ellos incluyeron una pequeña sección llamada Snake Pit, un área donde unos cuantos afortunados fans podían estar más cerca de la banda.
Desde entonces, el Snake Pit se ha mantenido durante la mayoría de las giras de Metallica como una especie de tradición. Para 1993 y después de aventarse algunos shows junto a Guns N’ Roses (donde lamentablemente, James Hetfield terminó con varias quemaduras por un accidente con la pirotecnia), la banda armó el tour Nowhere Else to Roam, con el que siguieron dándole vuelo al Black Album.
Para ser honestos, la puesta en escena fue prácticamente la misma del tour pasado. Sin embargo, una de las cosas más importantes de esta gira fue que con ella vinieron por primera vez a México, aventándose ni más ni menos que cinco noches en el Palacio de los Deportes de la CDMX que quedaron inmortalizadas en el primer disco en vivo del grupo, Live Shit: Binge & Purge.
Metallica le entró a los escenarios 360 desde hace muchos años
El escenario de Metallica se mantuvo casi intacto durante las giras Shit Hits the Sheds y Escape from the Studio ’95. Sin embargo, luego del lanzamiento de Load en 1996, decidieron cambiar por completo su show en vivo y vaya que una vez más, dejaron la vara muy alta dentro de la industria musical, con una producción totalmente renovada con la que dejaron claro porque son una de las bandas más grandes e importantes del mundo.
Para que se den una idea de cómo estuvo el asunto, en el Poor Touring Me Tour, con el que recorrieron Norteamérica y Europa, James, Lars, Kirk y James presentaron un escenario de 360º con dos plataformas montadas en medio de las arenas donde tocaban que le daba chance a la banda de estar cerca de sus fans y viceversa. Esto se puede ver a detalle en el disco en vivo, Cunning Stunts de 1997.
Luego de varios shows arriesgados, la banda volvió a lo básico en vivo
En los siguientes años, específicamente durante el Poor Re-Touring Me Tour, que se aventaron para promocionar Re-Load, y la gira de Garage Inc, Metallica volvió “a sus raíces”, presentando un show más tradicional sin una escenografía o montaje tan espectacular donde al parecer, lo único que importaba era tocar ponchado.
Aunque eso sí, entre estas fechas, grabaron uno de sus proyectos más ambiciosos, el S&M, donde por primera vez interpretaron sus rolas con la Orquesta Sinfónica de San Francisco. Por si eso no fuera suficiente, también volvieron a México para presentarse en el antiguo Foro Sol junto a Pantera y Monster Magnet, uno de los conciertos más recordados en la historia de nuestro país por el caos que se armó con la lluvia de sillas.
A finales de los 90, Metallica utilizó una vez más un escenario con rampas y plataformas para el M2K Mini Tour y ese formato lo mantuvieron en el Summer Sanitarium Tour entre 2000 y 2003. Aunque en medio de todo esto, Jason Newsted renunció a la agrupación y esa baja la tomaron como una oportunidad de reinventarse una vez más.
Para el nuevo milenio, la banda cambió de nuevo de aires. De entrada, llegó Robert Trujillo para tomar el bajo y con el lanzamiento de St. Anger, se embarcaron en el Madly in Anger with the World Tour, donde de nuevo montaron un escenario 360º (el cual solo se pudo ver durante las fechas por Norteamérica) que complementaron con pantallas para que todo el mundo pudiera ver al grupo en acción.
Metallica ha ido cambiando la forma en que sus fans viven sus conciertos
Las siguientes giras de Metallica (Escape from the Studio ’06, Sick of the Studio ’07 y la serie de presentaciones que dieron en 2008) se mantuvieron tal cual con una puesta en escena “sencilla”, donde solamente necesitaron una enorme pantalla LED de fondo, una plataforma montada atrás de la batería de Lars Ulrich y el ya mencionado Snake Pit para prender a las millones de personas que fueron a verlos en vivo durante esos años.
Pero con la llegada de Death Magnetic, su noveno álbum de estudio y una gira mundial en puerta, la banda llevó el concepto de sus tours previos al siguiente nivel. Lo decimos porque a pesar de que la esencia era la misma, mejoraron sus presentaciones con una pantalla de alta resolución detrás de ellos, unos ataúdes como los de la portada del disco llenos de luces y pirotecnia que complementaban a la perfección el setlist que estaban tocando.
En este punto de su carrera, parecía que Metallica no necesitaba más para dar conciertos rifados (y la verdad es que no les hacía falta agregarle nada), solo les bastaba tocar rolas poderosas y la energía de la gente para regalarnos presentaciones memorables. Aunque eso sí, en algunas fechas por Norteamérica y Europa, presentaron un formato 360º que más o menos veríamos en el futuro.
Prueba de ello son los shows que dieron entre 2009 y 2010 en México, pues después de una década de espera, regresaron a nuestro país. Y fueron tan buenos esos conciertos (hablando de las de la CDMX) que quedaron para la posteridad en el disco en vivo Orgullo, pasión y gloria: tres noches en la Ciudad de México. A continuación les dejamos el video para que lo chequen si es que no tuvieron la oportunidad de estar ahí o revivirlos si los presenciaron en el antiguo Foro Sol.
La banda regresó a México con “El Arsenal Completo”
Los siguientes años, los conciertos de Metallica se mantuvieron relativamente iguales con el mismo formato, durante las giras por el 20 aniversario del Black Album y los shows que se aventaron con Anthrax, Megadeth y Slayer. Sin embargo, la cosa cambió por completo en 2012, cuando presentaron The Full Arsenal Tour.
Para esta gira, la banda decidió montaron un espectáculo audiovisual nunca antes visto. De entrada, volvieron al escenario 360º con un piso lleno de pantallas, al cual le agregaron una escenografía impresionante repleta de referencia a sus tours y discos pasados (pues por ahí reapareció la dama de la justicia de …And Justice For All, máquinas de rayos para representar el Ride the Lightning y los ataúdes de Death Magnetic).
Pero lo más impactante de todo es que al final de cada show, Metallica hacía parecer como que el escenario estaba completamente destruido. Y sí, afortunadamente tuvimos chance de ver ese show en México, pues la banda lo presentó durante ocho noches sold out en el Palacio de los Deportes de la CDMX.
Metallica se convirtió en la primera banda en tocar en todos los continentes
Después de este espectáculo que a muchos nos voló la cabeza (y quizá algunos todavía no lo superan), Metallica regresó al formato de conciertos en vivo que venían mostrando desde Death Magnetic. Sin embargo, por ahí hicieron otras cosas interesantes, pues se aventaron un show llamado Freeze ‘Em All, el cual dieron en un domo cerca del helipuerto de la Base Carlini en la Antártida, convirtiéndose en la primera banda en tocar en los siete continentes, así como la única en actuar en todo el mundo en un solo año
Aunque bajita la mano le movieron un poco al asunto, como en el By Request Tour de 2014, donde había dos secciones a lado del escenario en las que unos cuantos fans podían disfrutar el show como si fueran el staff de la banda, una vista verdaderamente privilegiada y que muy pocos pueden experimentar. Lo mismo replicaron durante la gira Lords of Summer, solo que en esta ocasión, algunos seguidores pudieron checar el concierto justo arriba de la batería de Lars Ulrich.
Fue hasta 2016 cuando Metallica renovó su espectáculo en vivo, con el lanzamiento de su décimo material discográfico, Hardwired… to Self-Destruct. Para el WorldWired Tour, apostaron por un escenario gigantesco conformado por cinco megapantallas de alta definición adornadas a los lados por una “M” y “A” con la tipografía clásica de la banda –en referencia a su nombre– y el infaltable Snake Pit.
A todo esto se sumaron dos globos enormes con la portada del disco montados en lo alto del escenario, los cuales bajaban en una parte del show y que claro, se veían brutales. Y sí, en México también tuvimos chance de presenciar estos conciertazos, con las tres noches que la banda se aventó en el Foro Sol con el mismísimo Iggy Pop como invitado especial. Acá abajo les dejamos uno de esos conciertos para que chequen cómo estuvo.
Y pronto los tendremos de vuelta en nuestro país con el ‘M72 World Tour’
Antes de la pandemia, Metallica presentó la segunda parte del S&M con unas cuantas presentaciones especiales y cuando las cosas con el coronavirus se calmaron, la banda no tardó mucho en regresar a los escenarios. Entre 2021 y 2022 armaron una gira por sus cuatro décadas de carrera en la que retomaron los shows 360º, solo que en esta ocasión le agregaron una serie de pantalla en el techo que lucían impactantes.
Además de festejar sus 40 años de trayectoria, también aprovecharon para celebrar el 30 aniversario del Black Album. Aunque eso sí, solo en Norteamérica, Sudamérica y Europa tuvieron la oportunidad de ver estos conciertos. Pero como ya lo habrán notado, desde hace algunos años, James Hetfield y compañía no pasan mucho tiempo sin venir a nuestro país.
En 2023, Metallica estrenó su más reciente material discográfico, 72 Seasons, con el cual anunciaron el M72 World Tour, una gira para presentar este álbum de estudio con el que una vez más, la banda está mostrando un concepto nuevo para estos conciertos en vivo e incluso innovando de otras maneras que seguro veremos más a menudo en la industria musical.
De entrada, el grupo está presentando este espectáculo con dos o más actuaciones en la mayoría de las ciudades en las que tocan y diversos actos teloneros de alto nivel. En cuanto al show, vuelven al formato del escenario 360º con el Snake Pit colocado justo en medio. A esto se le suman ocho torres en los que además de colocar bocinas, en la cima pusieron pantallas circulares que lucen brutales.
Afortunadamente para los fans mexicanos de Metallica, no se quedarán con las ganas de ver este showsazo en vivo y a todo color, pues la banda cerrará el M72 World Tour con dos fines de semana en el Estadio GNP Seguros de la CDMX, que prometen ser de los mejores conciertos del año (acá les dejamos las rolas que podrían tocar). ¿Qué tal? ¿Están listos para vivir cuatro noches llenos de metal y un espectáculo audiovisual insuperable?