
La empresa española Cox anunció la adquisición de Iberdrola México por 4 mil 200 millones de dólares, consolidándose como uno de los actores más relevantes del sector energético en el país. Con esta operación, Cox completó su plan estratégico tres años antes de lo previsto, el cual estaba contemplado para el periodo 2025-2028.
15 plantas y liderazgo en el mercado
De acuerdo con el comunicado oficial, el acuerdo incluye la compra de 15 centrales operativas que suman más de 2,600 megavatios (MW) de potencia instalada. Con esto, la compañía se convierte en la mayor suministradora de usuarios calificados en México, con una cuota del 25% en un mercado de 20 teravatios-hora (TWh).
La empresa calificó la operación como “transformacional”, ya que permitirá generar importantes sinergias y consolidar a México como un país estratégico en su modelo de negocio. Además, destacó que esta adquisición integra los sectores de agua y energía, abriendo la puerta a nuevos proyectos que beneficien al desarrollo económico y social del país.
Inversión millonaria a largo plazo
Cox también adelantó que su presencia en México no se limitará a esta compra. La compañía prevé invertir 10 mil 700 millones de dólares en los próximos cinco años (2025-2030), destinados a nuevos activos de generación de energía por más de 4 mil millones de dólares, así como a proyectos concesionales de agua por hasta 1,500 millones de dólares.
Parte de esta estrategia incluye la colaboración con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en proyectos de generación conjunta, lo que podría fortalecer la infraestructura energética del país.