
28 DE JUNIO 2025-El escándalo internacional conocido como el “Caso Koldo” ha cruzado fronteras y ahora apunta directamente a México, específicamente al Tren Maya, uno de los proyectos estrella del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Esta trama de corrupción, que tiene su origen en España y que involucra a altos funcionarios del gobierno de Pedro Sánchez, empieza a involucrar a políticos y obras públicas mexicanas.
El portal español “The Objective” reveló que empresas vinculadas a Koldo García, exasesor del exministro José Luis Ábalos, y al empresario Víctor de Aldama, obtuvieron millonarios contratos para participar en la construcción del Tren Maya. Estas relaciones han puesto bajo sospecha a personajes del ámbito político mexicano, especialmente del partido Morena.

Entre los nombres que destacan se encuentran Alejandro Murat, exgobernador de Oaxaca y actual senador de Morena, así como Pedro Haces, diputado del mismo partido. Ambos habrían tenido conexiones con el empresario español Víctor de Aldama, figura clave en la red de corrupción europea. Estos vínculos sugieren que la influencia de la trama no solo fue local en España, sino que también logró extenderse hasta América Latina.
La construcción del Tren Maya y la refinería Dos Bocas bajo la lupa
Además del Tren Maya, otro de los proyectos emblemáticos del actual gobierno, la refinería de Dos Bocas, también se ve envuelta en este caso. La empresa española “Acciona”, señalada por haber entregado sobornos a funcionarios ibéricos, participó activamente en esta obra mexicana, levantando aún más sospechas sobre la legalidad de sus contratos y los criterios de asignación.

Este nuevo ángulo del escándalo ha generado una ola de críticas hacia las instituciones encargadas de la transparencia en la contratación pública en México. Diversos sectores exigen que se realicen investigaciones profundas y se esclarezca si hubo actos indebidos en la concesión de contratos a empresas relacionadas con los involucrados en el Caso Koldo.
Por ahora, ni el gobierno federal ni los políticos mexicanos mencionados han emitido declaraciones oficiales sobre estas acusaciones. Sin embargo, el tema ha escalado en medios nacionales e internacionales, poniendo una vez más en entredicho la integridad de megaproyectos que han sido promovidos como pilares de desarrollo nacional.