
La Justicia argentina concedió la prisión domiciliaria a la expresidenta Cristina Fernández (2007-2015), condenada a seis años e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos por irregularidades en la concesión de obras públicas entre 2003 y 2015.

Con información de EFE
Es increíble que a pesar de las irregularidades que cometió, ahora tenga prisión domiciliaria. Parece que siempre hay una salida para los que están en el poder. Esto deja un mal sabor de boca y hace que la gente pierda la fe en la justicia.