
14 de Noviembre del 2025.- Un reciente estudio científico ha encendido las alarmas a nivel mundial, determinando que una corriente del Atlántico vital para la estabilidad climática podría llegar al borde del colapso total en cuestión de décadas. Este evento desataría una nueva era glacial y provocaría una drástica elevación del nivel del mar. Estas predicciones, calificadas como apocalípticas, fueron presentadas por un equipo conjunto de investigadores de China y Estados Unidos, y sus hallazgos han sido publicados en la prestigiosa revista Communcations Earth & Environment.
La corriente en riesgo es conocida formalmente como la Circulación Meridional de Retorno del Atlántico, o AMOC por sus siglas en inglés. Este sistema funciona como una colosal «cinta transportadora del océano». Su recorrido es fundamental para el planeta: se origina en el golfo de México, viaja hacia el norte por la costa este de Estados Unidos y luego cruza el océano Atlántico hasta llegar a Europa. La función principal de esta corriente del Atlántico es mantener el clima templado y habitable en gran parte de Europa, el Reino Unido y secciones de Estados Unidos.
El motor principal que regula la temperatura de esta corriente es la masiva capa de hielo de Groenlandia. Sin embargo, esta masa de hielo se está descongelando a un ritmo alarmante debido al aumento sostenido de las temperaturas globales. Este derretimiento está provocando que ingentes cantidades de agua dulce se filtren directamente al Atlántico Norte. Es precisamente esta agua dulce, menos densa que el agua salada, la que está causando un estancamiento y frenando el motor de la corriente del Atlántico.
Los científicos que participaron en la investigación encontraron evidencia concreta de que el sistema ya está en problemas. Detectaron una clara tendencia al calentamiento en las profundidades medias del océano, un fenómeno que se disparó a finales de la década de los 2000. Este calentamiento a media profundidad, según el estudio, es una señal inequívoca que fija el decaimiento de la AMOC y demuestra que la corriente está perdiendo fuerza de manera peligrosa.
Las proyecciones sobre el cronograma de este colapso son lo más preocupante del informe. Los investigadores determinaron que no se trata de una amenaza lejana para futuras generaciones, sino de un peligro inminente. El equipo científico concluyó que se podría producir un declive total y un colapso definitivo de esta corriente del Atlántico antes de que se acabe este mismo siglo, un escenario que se materializaría en apenas unas pocas décadas.
Las dramáticas consecuencias del colapso
Si esta corriente fundamental finalmente se detiene, las consecuencias serían dramáticas y catastróficas a escala global. El estudio predice un descenso de unos 60 grados en las temperaturas promedio de invierno en Europa, sumiendo al continente en un frío extremo. Además, este colapso provocaría una considerable disminución de las precipitaciones en muchas regiones, afectando gravemente la agricultura mundial y el suministro de agua potable para miles de millones de personas.
Un evento que antecedió a la Edad de Hielo
Este escenario de un colapso total de la AMOC no es una simple simulación teórica; tiene un aterrador precedente en la historia del planeta. Los científicos recordaron que la última vez que esta corriente del Atlántico se congestionó y se detuvo a una magnitud similar fue justo antes de que comenzara la última Edad de Hielo. Este hecho histórico subraya la gravedad de la situación actual y la capacidad real que tiene esta corriente para alterar drásticamente el clima de todo el hemisferio norte.








