
#China critica el sistema de defensa espacial #estadounidense
El gobierno de China expresó su rechazo al plan de Estados Unidos para desarrollar la Cúpula Dorada, un sistema de defensa antimisiles espacial impulsado por la administración de Donald Trump. A través del Ministerio de Relaciones Exteriores, el país asiático pidió de manera formal que Washington suspenda el proyecto.
Las autoridades chinas aseguran que la Cúpula Dorada no solo incrementa la tensión internacional, sino que también podría violar el Tratado del Espacio Exterior, un acuerdo firmado por varias naciones para evitar la militarización del espacio.
Preocupación por la estabilidad mundial
China advirtió que este tipo de iniciativas pone en riesgo la estabilidad mundial, ya que promueve una nueva carrera armamentista fuera del planeta. Además, señalaron que podría generar desconfianza entre las principales potencias y dañar las relaciones diplomáticas existentes.
Según los portavoces del gobierno chino, en lugar de enfocarse en sistemas de defensa espaciales, las grandes potencias deberían trabajar juntas en mantener la paz y el equilibrio global.
Llamado a respetar los acuerdos internacionales


El Ministerio de Relaciones Exteriores de China subrayó que el Tratado del Espacio Exterior establece que ningún país debe colocar armas nucleares o cualquier otro tipo de armamento en órbita ni instalar bases militares fuera de la Tierra. Por ello, califican la Cúpula Dorada como una iniciativa peligrosa que desafía ese compromiso.
También hicieron un llamado a la comunidad internacional para que vigile de cerca este proyecto y exhorte a Estados Unidos a respetar los tratados vigentes.
Reacción pendiente de Estados Unidos

Hasta el momento, el gobierno estadounidense no ha emitido una respuesta oficial a la postura de China. La administración Trump ha defendido la Cúpula Dorada como un elemento esencial para la seguridad nacional, aunque ahora deberá enfrentar las críticas a nivel global.
Analistas internacionales creen que esta situación podría tensar aún más la relación entre China y Estados Unidos, especialmente en un contexto donde ya existen fricciones comerciales, tecnológicas y diplomáticas.