El Ayuntamiento de Benito Juárez, en colaboración con el gobierno estatal, reafirmó su preparación y compromiso con la protección civil al realizar con éxito dos simulacros simultáneos. Los ejercicios, llevados a cabo en una plaza comercial y en el Palacio Municipal, formaron parte del Segundo Simulacro Nacional 2025. El objetivo principal de estas acciones fue poner a prueba los protocolos de emergencia y reforzar la preparación de la población y los cuerpos de rescate ante posibles incidentes como explosiones o incendios, que amenazan la vida y los bienes de los ciudadanos.
Por primera vez, un simulacro de esta magnitud se realizó en el centro comercial «Malecón Las Américas», con la presencia de la gobernadora Mara Lezama. El ejercicio se activó a las 13:00 horas con el nuevo Sistema Nacional de Alerta, que por primera vez se notificó a través de los teléfonos celulares de toda la población. La hipótesis del simulacro fue una explosión en uno de los establecimientos, lo que puso a prueba la capacidad de respuesta de los equipos de emergencia y la preparación de los trabajadores y clientes para evacuar.
Simulación de emergencia en el Palacio Municipal
Tras la alerta, los equipos de emergencia —incluyendo Protección Civil, Seguridad Pública, y Bomberos— se coordinaron para instalar un puesto de mando y atender la situación. En la plaza comercial, se activaron las alarmas y se simuló la explosión de gas, lo que llevó a la evacuación inmediata de trabajadores y clientes. Se reportó la presencia de un ciudadano herido en un pasillo, que fue asistido por los equipos de rescate. Los bomberos se encargaron de «apagar» el fuego y realizar un rescate vertical de una víctima que se encontraba en el techo. Este nivel de detalle en la simulación es crucial para una preparación completa de los equipos.
El simulacro en la plaza comercial tuvo un resultado exitoso: los equipos de emergencia del recinto llegaron en dos minutos, la práctica duró 17 minutos en total, y se logró evacuar a 1,198 personas. Además, 57 servidores públicos de seis dependencias diferentes participaron en la operación. Estos resultados demuestran la eficiencia de los protocolos de emergencia y la capacidad de los equipos de respuesta rápida. El ejercicio sirvió para validar los planes de acción y evaluar el nivel de preparación de las instituciones.
A la misma hora, en el Palacio Municipal, sonó la alerta en los teléfonos celulares del personal. Inmediatamente, se activó el protocolo de emergencia, y los trabajadores de varias dependencias comenzaron a evacuar ordenadamente hacia la Plaza de la Reforma. El personal de Protección Civil dirigió a los evacuados al punto de reunión, donde se realizó un conteo. El simulacro en el Palacio Municipal fue completado en 10 minutos, con la evacuación de 408 personas. Durante el ejercicio, un paramédico de Protección Civil atendió a una persona con un esguince en el tobillo, lo que añadió un toque de realismo y demostró la atención médica inmediata.
Un valor agregado notable en este tipo de ejercicios es el énfasis en la capacitación y el equipamiento del personal. Más allá de las alarmas y la evacuación, los simulacros son oportunidades vitales para que las brigadas de emergencia —identificadas con chalecos distintivos como «Jefe de Brigada», «Evacuación y Desalojo», «Combate de Incendios» y «Primeros Auxilios»— practiquen sus roles y responsabilidades. La mejora continua en las capacidades de estos equipos garantiza una respuesta más rápida y coordinada en situaciones reales. La preparación del personal es tan importante como la tecnología y los planes, ya que son ellos quienes, en última instancia, salvan vidas y minimizan los daños.
