Issabela Camil sorprende nuevamente a su público con un renovado cambio de look que mezcla estilo personal y frescura. Tras unas vacaciones relajadas en Italia, la actriz decidió darle un giro sutil pero significativo a su melena rubia, uno de sus rasgos más emblemáticos. Compartió a través de Instagram el momento en que consultó con su comunidad virtual sobre la posibilidad de cortarse las puntas, lo que despertó gran expectativa entre sus seguidores.
La protagonista del cambio se presentó en el salón acompañada por su estilista de confianza, César Bauthi, quien también atiende el cabello de su hija Antonia. Él propuso realzar su tono rubio y aplicar “blindajes” para proteger el cabello durante el proceso. Esta intervención buscó revitalizar su melena, darle mayor luminosidad y mantener su característico rubio impecable.
En el clip difundido, Issabela observa con satisfacción su reflejo tras el cambio y comenta: “¡Está perfecto! precioso”. El peinado lacio acentuó el nuevo acabado del color y dejó en evidencia el cuidado detrás del resultado. Su comentario refleja satisfacción personal, lo que inevitablemente se conecta con el bienestar que transmite un cambio de imagen bien ejecutado.
Issabela ha hablado con frecuencia sobre la importancia del cabello en la identidad y el estilo. Durante una entrevista en el podcast “M de Majo Adame”, señaló que el pelo tiene un “poder divino”: cambiar el peinado —chino, lacio, fleco o largo— puede transformar completamente un look. Este enfoque íntimo y reflexivo demuestra una conexión entre la estética y la autopercepción, algo especialmente valioso en el contexto de figuras públicas.
Su estilo se ha consolidado como una mezcla de maximalismo, prendas vintage y una fuerte impronta personal. Issabela contó cómo desde niña admiraba la ropa de su madre —especialmente las piezas de Chanel—, lo que la llevó, al vivir en Nueva York, a descubrir tiendas vintage que definieron su sello estilístico: piezas únicas, creativas y fuera del circuito convencional .
Lejos de seguir modas pasajeras, Issabela se enfoca en lo que la representa. Su enfoque maximalista no solo se ve en su vestuario, sino en cómo asume su imagen personal como una extensión de su identidad. Sus declaraciones revelan que su verdadero poder reside en aceptar su singularidad, más allá del canon estético tradicional.
