
Los Premios Juventud 2025 se celebraron con gran expectativa, y más allá de los reconocimientos musicales, la moda se convirtió en protagonista de la noche. En el escenario del Figali Convention Center en Panamá, las celebridades latinas desfilaron con atuendos audaces, sofisticados y llamativos que dejaron huella. Desde transparencias hasta metales brillantes, hubo un sinfín de estilos que mostraron la diversidad estética de la cultura latina. La alfombra azul se transformó en una pasarela que combinó riesgo y elegancia.
La velada contó con la conducción de Alejandra Espinoza, Clarissa Molina y Nadia Ferreira, quienes desde el inicio impusieron un tono glamoroso. Entre los invitados figuraron nombres como Natti Natasha, Camilo, Maluma, Sofía Castro y Angélica Rivera. Las apariciones no solo destacaron por la fama de los asistentes, sino por sus propuestas estilísticas, muchas de ellas cargadas de simbolismo y actualidad. La moda se convirtió en un canal adicional para expresar identidad, pertenencia y vanguardia.
Looks que destacaron en la alfombra
Natti Natasha sorprendió luciendo su embarazo con un vestido cubierto de brillos, manga larga y un diseño que acentuó su silueta con mucha elegancia. Nadia Ferreira optó por un vibrante vestido rojo con escote halter, que resaltó su presencia como modelo y conductora. Camilo, fiel a su estilo único, combinó una camisa oversized negra con pantalones estampados, mostrando que la comodidad también puede ir de la mano con la creatividad.

Por su parte, Diego Klein arriesgó con un saco café sin camisa y pantalón negro, apostando por un look audaz y sofisticado. Emilia Mernes eligió un vestido midi en tonos cereza con top acorsetado, equilibrando recato y sensualidad. Gloria Trevi resplandeció con un minivestido plateado y plataformas impactantes, mientras que Carlos Vives rompió esquemas con un traje de tres piezas con una camisa desabotonada que generó contraste estilístico.
Entre lo clásico y lo vanguardista
Angélica Rivera rescató el clasicismo con un vestido de manga larga con detalles brillantes, una propuesta que le permitió brillar sin excesos. Bad Gyal, por su parte, no temió explorar oscuridad y sensualidad con un diseño de encaje semitransparente. Majo Aguilar sorprendió con un vestido estampado con un profundo escote en la espalda, fusionando elementos tradicionales con cortes modernos. Maluma y Morat apostaron por atuendos impecables, con trajes estructurados que equilibraron elegancia y presencia artística.
Estas elecciones de vestuario reflejan una transición clara en los premios de entretenimiento: la moda ya no es complemento, sino elemento central. Cada prenda contó una historia, cada textura buscó impacto, y cada combinación buscó ser memorable. En este contexto, los Premios Juventud 2025 lograron elevar la moda latina a un plano tan relevante como la música misma.
Un aspecto que no fue parte central de la cobertura, pero que merece atención, es el uso creciente de moda sostenible entre los invitados. En esta edición se notó que algunos diseñadores incorporaron telas ecológicas o materiales reciclados en sus propuestas, aunque no se destacó oficialmente. Sería valioso que futuras premiaciones incluyan dentro de sus criterios la conciencia ambiental: por ejemplo, premiar al look más sustentable o exigir transparencia en el origen de los materiales usados en las estrellas. Esa práctica enriquecería la experiencia estética con responsabilidad, y convertiría la alfombra azul en un espacio que también impulse la moda ética en Latinoamérica.
