CHIHUAHUA.- La tarde de ayer jueves, el municipio Guachochi en la sierra Tarahumara, vivió momentos de pánico debido a una serie de enfrentamientos armados, incendios y bloqueos presuntamente relacionados con grupos del crimen organizado que operan en la región.
Mediante redes sociales vecinos de diversas colonias reportaron ráfagas de alto calibre, así como la circulación de vehículos con sujetos armados en distintos puntos del municipio. Las imágenes muestran camionetas calcinadas y humo elevándose en caminos rurales.
Elementos del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado llegaron a la zona.
El fiscal general del Estado, César Jáuregui, comentó que lo ocurrido en Guachochi, estaría relacionado con un ataque ocurrido en una casa, sin que hasta ahora haya reporte de muertes o heridos.
Obispo de la Tarahumara condena violencia en Guachochi
Luego de las horas de pánico en la comunidad de Guachochi, el obispo de la Diócesis de la Tarahumara emitió un mensaje de consuelo y esperanza para los habitantes de la región.
“Con el corazón profundamente conmovido me dirijo a ustedes, después de los dolorosos acontecimientos que hemos vivido en estos días en nuestro querido Guachochi”, expresó el obispo. “Las balaceras que se han presentado han sembrado miedo, angustia y dolor en nuestras calles, hogares y corazones.”
El líder religioso manifestó su repudio a toda forma de violencia y ofreció palabras de aliento a quienes han sido testigos de estos momentos aterradores. “A quienes hoy sienten el corazón herido por la inseguridad que nos rodea, les digo: no están solos. Jesús, que lloró ante la tumba de su amigo Lázaro, está hoy con nosotros, llorando con nosotros, caminando con nosotros. Como Iglesia, estamos con ustedes.”
En su mensaje, el obispo hizo un llamado a la esperanza y a la construcción de la paz desde las familias y comunidades. “Aunque la noche parezca oscura, no olvidemos que somos hijos de la luz. El miedo no tiene la última palabra. Dios no abandona a su pueblo.”
Es increíble que en pleno 2025 sigamos escuchando noticias de balaceras y violencia en lugares como Guachochi. La gente no debería vivir con miedo en su propia casa. Es hora de que las autoridades hagan algo real y efectivo para frenar esta situación. Ya basta de palabras y promesas vacías. La paz es lo que realmente se necesita.
Es increíble que en pleno 2025 sigamos escuchando de balaceras y pánico en nuestros pueblos. La violencia parece no tener fin y lo peor es que la gente que sufre son los inocentes. Es triste que en lugar de vivir en paz, la gente tenga que estar preocupada por su seguridad. Necesitamos más acciones para frenar esto y que la paz sea una realidad, no solo palabras de algún líder.