
23 de Octubre del 2025.- La Tormenta Tropical Melissa se ha formado en el Mar Caribe, pero se encuentra a una distancia considerable de las costas mexicanas. El centro de este sistema ciclónico fue localizado a 355 kilómetros al sureste de Kingston, la capital de Jamaica. Para la Península de Yucatán, la distancia es mucho mayor, ya que la tormenta se ubica a 1,400 kilómetros al este-sureste de las costas de Quintana Roo, lo que da un amplio margen de seguridad para el estado.
El sistema presenta vientos máximos sostenidos que alcanzan los 75 kilómetros por hora, con ráfagas o vientos momentáneos más fuertes que llegan a los 95 kilómetros por hora. Un dato relevante de esta tormenta Melissa es su lento desplazamiento. Actualmente, se mueve hacia el nor-noroeste a una velocidad de apenas 4 kilómetros por hora, lo que facilita su seguimiento y análisis por parte de los meteorólogos.
El mensaje principal para la población de Quintana Roo y de todo el territorio mexicano es de tranquilidad. Las autoridades de Protección Civil han confirmado que, debido a su lejanía y a la trayectoria que se pronostica, este ciclón tropical no representa ningún tipo de peligro para México. Los modelos de pronóstico actuales indican que mantendrá su curso sobre aguas abiertas del Caribe, lejos de las costas nacionales.

Es útil saber cómo se clasifican estos fenómenos. Un sistema recibe un nombre, en este caso Melissa, cuando sus vientos sostenidos alcanzan los 63 km/h. Con 75 km/h, este sistema se clasifica como tormenta tropical. Si sus vientos llegaran a aumentar y superar los 119 km/h, entonces se reclasificaría como un huracán. Por ahora, se mantiene en la primera categoría de ciclón con nombre.
A pesar de que el sistema no es una amenaza directa, las dependencias oficiales de México mantienen una vigilancia permanente sobre su evolución. El monitoreo de su trayectoria y posible intensificación es constante, como se hace con cualquier fenómeno que se desarrolla en la cuenca del Atlántico. Este seguimiento es un protocolo estándar para garantizar la seguridad y estar preparados ante cualquier cambio inesperado en el pronóstico.