CULIACÁN.- La mañana de este martes 7 de enero, asesinaron a un comandante de la Policía Municipal de Culiacán luego de una persecución en el fraccionamiento Nakayama del sector Barrancos.
Juan Carlos “N”, de 45 años de edad, recién relevado del cargo de comandante de la policía en la sindicatura de Sanalona, quien conducía un vehículo Jetta, recién había concluido su jornada de servicio y retornaba a su hogar para descansar, cuando fue atacado desde tres puntos distintos por hombres armados.
Información preliminar refiere dos vehículos lo interceptaron y personas armadas le dispararon.
Ante el suceso, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ante medios de comunicación condenó el asesinato del policía y envió su solidaridad con su familia y su corporación.
Ola de violencia en Sinaloa
Además se registraron tres nuevos asesinatos y ataques a balazos contra inmuebles, uno de ellos, ubicado en el fraccionamiento Villa Bonita, el cual en un tiempo operó como un minicasino clandestino, pero en la actualidad estaba deshabitado.
A un costado de la carretera 19, cerca del Trébol de la sindicatura de Costa Rica, localizaron el cuerpo de un hombre, atado de pies y manos y envuelto en una cobija, el cual presentaba impactos de bala y huellas de tortura.
Asesinan a hombres en predio dónde operaba mini casino
Sobre la calle Cofre de Perote, muy cerca de un parque infantil del fraccionamiento Villa Bonita, varios hombres armados dispararon contra Juan “N” y Kevin Isaac “N”, los cuales estaban parados platicando, estos fallecieron en el lugar de los hechos derivados de los impactos de bala que recibieron.
Los atacantes, cien metros adelante, volvieron a bajar de sus vehículos y dispararon contra la fachada, puertas y ventanas de una vivienda desocupada. Se supo que dicho lugar meses antes, operó como “una casa de juego con maquinitas tragamonedas”.
Asesinan a otro hombre
En un edificio de departamentos del fraccionamiento Fovisste Diamantes, varios hombres armados dispararon contra el inmueble dónde un hombre resultó herido. Presuntamente lo levantaron y se lo llevaron.
Los datos que se aportaron, es que en ese sitio de la avenida Obrero Mundial, aseguraron dos vehículos, uno de ellos un Sentra, los cuales presentaban impactos de bala, por lo que se presume que sus ocupantes los abandonaron.
También, en el fraccionamiento la Florida, de la capital del estado, varios hombres armados que viajaban en camioneta, al llegar frente a una residencia de dos pisos, descendieron y dispararon contra el portón principal, ventanas y fachada, sin que se registraran personas lesionadas.
Es una pena lo que ha pasado. La violencia parece no tener fin y lo peor es que no solo se trata de estadísticas, son vidas humanas las que se pierden. La situación en Culiacán es crítica y esto solo muestra que, a pesar de los esfuerzos, hay muchas cosas por hacer. Me da tristeza pensar en las familias que quedan destrozadas. Necesitamos soluciones reales y no solo palabras.