
La crisis en Ecuador escaló dramáticamente este martes luego de que el gobierno denunciara un intento de atentado contra el presidente Daniel Noboa. Cinco personas fueron detenidas tras el incidente, que ocurrió en el municipio de El Tambo, provincia de Cañar, mientras el mandatario llegaba a un evento. La ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, informó que unas 500 personas lanzaron piedras contra el vehículo presidencial, y aseguró que se encontraron «signos de bala». El gobierno ha precisado que los arrestados serán acusados de terrorismo e intento de asesinato.
El Incidente del Atentado y la Respuesta Indígena
El vehículo de Noboa mostró tres pequeños agujeros en una de sus ventanas, según un video compartido por la oficina presidencial, lo que ha generado la grave acusación de intento de atentado. Sin embargo, la BBC no ha podido confirmar de forma independiente si hubo disparos de bala. La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que encabeza un paro nacional de más de dos semanas, reaccionó de inmediato, asegurando que los cinco detenidos son miembros de su organización y que las detenciones fueron «arbitrarias».
Este incidente se suma a una creciente ola de violencia que comenzó con el paro nacional convocado por la Conaie para protestar contra la eliminación del subsidio al diésel. El gobierno de Noboa defiende la medida, argumentando que el ahorro de US$1.100 millones al año se redistribuirá en programas sociales para pequeños agricultores y trabajadores. Las protestas, que incluyen marchas y bloqueos de carreteras, han generado un alto nivel de tensión en todo el país.
El Historial de Violencia y la Acusación de Terrorismo
La acusación de terrorismo e intento de asesinato eleva el conflicto a un nivel de máxima gravedad. La Conaie ha denunciado la acción del gobierno como «violenta represión», mientras que las autoridades han calificado las acciones de la organización como «criminales». Este no es el primer incidente violento contra el presidente; la semana pasada, otro convoy de Noboa, que incluía altos diplomáticos de la ONU y la Unión Europea, también fue emboscado por manifestantes, resultando en vehículos con parabrisas y ventanas destrozadas.
Las protestas han dejado un saldo de heridos en las Fuerzas Armadas y una persona muerta, según reportes de la Conaie. La tensión es palpable y recuerda los antecedentes históricos de la organización indígena, que ya lideró movilizaciones que terminaron con el derrocamiento de tres presidentes ecuatorianos entre 1997 y 2005. Noboa parece decidido a no ceder, en contraste con sus predecesores.
