
La FIFA no sólo eligió a México como una de las sedes de la Copa del Mundo 2026, también ha expresado su plena confianza en los protocolos de seguridad que el país ha implementado para recibir a millones de aficionados. Desde tecnología de vanguardia hasta la coordinación entre fuerzas armadas y autoridades locales, México se alista para ofrecer un evento histórico y, sobre todo, seguro.
En los últimos años, el país ha desarrollado un plan integral de seguridad que incluye simulacros de alto impacto: desde la atención de posibles atentados o emergencias químicas, hasta protocolos ante desastres naturales. Todo ello con un objetivo claro: garantizar que el Mundial se viva con emoción, no con preocupación. Los operativos cubrirán estadios, aeropuertos, transporte público y zonas de alta concentración, para que la experiencia de los visitantes sea impecable.
Los tres estadios mexicanos —el Estadio Azteca en la Ciudad de México, el Estadio Akron en Guadalajara y el BBVA en Monterrey— ya están equipados con tecnología de vigilancia inteligente, sistemas automáticos de detección de incendios y monitoreo en tiempo real. Cada rincón está siendo preparado para ofrecer seguridad de nivel internacional sin sacrificar la pasión que caracteriza al fútbol mexicano.
Pero más allá de la infraestructura, lo que ha llamado la atención de la FIFA es el entrenamiento especializado que México ha desarrollado desde 2019. Personal de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional y Protección Civil ha participado en cursos de combate al terrorismo, manejo de emergencias químicas y atención a crisis internacionales, incluso en colaboración con otros países. Un esfuerzo que demuestra que el país no toma este reto a la ligera.
En la Ciudad de México, se creó además un Subcomité de Protección Civil que coordinará acciones ante posibles contingencias durante el Mundial, desde sismos hasta tormentas intensas. La meta es una sola: que cada partido, cada celebración y cada visitante vivan la máxima seguridad posible, sin importar las circunstancias.








