
11 de Noviembre del 2025.- La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, conocida como NOAA, ha encendido las alarmas a nivel global. La agencia emitió este martes una serie de advertencias sobre tormentas geomagnéticas que afectarán a nuestro planeta en los próximos días. La preocupación principal se centra en una alerta de nivel G4, catalogada como «severa», prevista para este 12 de noviembre. Esta situación se debe a una reciente y notable actividad solar que ha sido monitoreada de cerca por los científicos.
El origen de esta alerta son varias eyecciones de masa coronal (EMC) que han salido disparadas desde el Sol. Estas gigantescas nubes de plasma solar viajan por el espacio y se espera que impacten el campo magnético de la Tierra entre el 11 y el 13 de noviembre. Las tormentas geomagnéticas son, en esencia, perturbaciones en el entorno espacial de la Tierra causadas por esta interacción. No se trata de una sola explosión, sino de una serie de eventos solares ocurridos recientemente en un corto período.
Los avisos actuales de la NOAA no se limitan al evento severo. También se contempla actividad de nivel G2 (moderada) para el 11 de noviembre y G3 (fuerte) para el 13 de noviembre. Estas EMC fueron provocadas por intensas explosiones solares registradas los días 7, 9 y 12 de noviembre. La más reciente ha sido la más energética y rápida del período. Esta última estuvo asociada a una poderosa llamarada solar de clase X5.1, cuyo pico ocurrió a las 10:04 (UTC) del 11 de noviembre.
¿Qué son las llamaradas clase X y las EMC?
Para entender la magnitud, las llamaradas solares se clasifican en categorías (A, B, C, M y X) según su intensidad. Las llamaradas de clase X, como la X5.1 registrada, son las más potentes y pueden desencadenar eventos significativos. Estas explosiones liberan enormes cantidades de radiación al espacio. Cuando estas explosiones están acompañadas de una eyección de masa coronal (EMC), lanzan miles de millones de toneladas de material solar al espacio a velocidades que pueden superar los millones de kilómetros por hora, creando una tormenta solar directa.






