CIUDAD DE MÉXICO.- Las comisiones unidas de Vivienda y Turismo del Congreso de la Ciudad de México aprobaron un dictamen para ponerle un tope al alojamiento temporal tipo Airbnb.
En sesión virtual extraordinaria, se avalaron reformas a las leyes de Vivienda, Turismo y Reconstrucción, promovidas por el Jefe de Gobierno, Martí Batres, para que no se le renueve el permiso a aquellos inmuebles de alojamiento temporal que hayan tenido ocupación de más del 50% de las noches del año.
¿Qué inmuebles no puede dar alojamiento temporal?
De igual forma, se estipula que, con la finalidad de dotar de certeza jurídica la ocupación de los inmuebles en los programas de vivienda de carácter popular, social y en arrendamiento, no podrán ser utilizados para los esquemas de estancia turística eventual.
“La restricción prevista en el párrafo anterior también será aplicable para el caso de vivienda de interés social, popular y sustentable construida bajo la aplicación de la Norma de Ordenación Número 26”, se detalla en el dictamen.
Asimismo, se estipula que queda prohibido destinar las viviendas que se reconstruyan, tras el sismo de 2017, a otros fines que no sean los objetivos previstos en los programas de reconstrucción.
Entre otros, “no podrán ser utilizados para los esquemas de estancia turística eventual previstos en la Ley de Turismo de la Ciudad de México”.
“Cancha pareja” al alojamiento temporal y al hospedaje formal
Al respecto, Emilio Guijosa, presidente de la Comisión de Vivienda, expresó que debe propiciarse “cancha pareja” entre plataformas de alojamiento temporal y el hospedaje formal.
A su vez, la diputada Frida Guillén, del PAN, señaló estar de acuerdo con la finalidad del dictamen, pero manifestó su preocupación porque la propuesta no contribuye a solucionar el problema de gentrificación y desplazamiento con los plazos que señala y propuso mayor análisis.
Su compañera de partido Olivia Garza presentó una reserva para modificar los porcentajes de reservación que maneja la propuesta, para pasar del 50 al 80%.
La decisión de establecer un tope al hospedaje temporal en la Ciudad de México es un paso necesario para proteger la vivienda de los residentes. Este tipo de alojamiento, como Airbnb, ha aumentado en popularidad, pero también ha provocado problemas como el encarecimiento de los alquileres y la pérdida de vecindarios.
Por un lado, es positivo que se regule este sector, ya que ayudará a que más personas puedan encontrar lugares asequibles para vivir. Además, esto puede beneficiar a los turistas, asegurando que haya un equilibrio entre la oferta turística y el bienestar de los ciudadanos.
Sin embargo, también hay preocupaciones. Algunos propietarios de estos alojamientos dependen de ellos como fuente de ingresos, y limitar su uso podría afectar su economía. Es importante que se busquen soluciones que tomen en cuenta tanto las necesidades de los residentes como las de quienes ofrecen estos servicios.
En resumen, aunque la medida tiene aspectos positivos, debe implementarse con cuidado y atención a los intereses de todos los involucrados.
«Finalmente, aprobaron una ley para limitar el hospedaje temporal tipo Airbnb. Parece que no quieren que la gente tenga opciones económicas y cómodas para quedarse en la ciudad. ¡Que aburrido!»