
28 OCTUBRE 2025-INTERNACIONAL-El expresidente brasileño Jair Bolsonaro presentó una apelación ante el Supremo Tribunal Federal (STF) para intentar reducir la condena de 27 años de prisión que se le impuso por golpismo, argumentando que durante el proceso se violaron sus derechos a la defensa y al debido proceso. El recurso fue ingresado el lunes, justo cuando vencía el plazo para que los ocho acusados por intento de golpe presentaran sus primeras apelaciones.
Según el documento, los abogados del exmandatario afirmaron que su cliente fue condenado injustamente con base en una confesión “viciada y contradictoria” de uno de sus antiguos colaboradores, el teniente coronel Mauro Cid, quien habría ofrecido su testimonio bajo presión. Además, la defensa señaló que el Supremo incurrió en un “error jurídico” al considerar como delitos separados el golpe de Estado y la abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, cuando, a su juicio, ambos corresponden al mismo acto.
Defensa de Bolsonaro cuestiona legalidad del proceso

El equipo legal del exmandatario aseguró que hubo violaciones a su derecho de defensa al no habérsele otorgado el tiempo suficiente para analizar la vasta cantidad de pruebas, que suman alrededor de 70 terabytes de información. También acusaron al magistrado Alexandre de Moraes, instructor del caso, de rechazar múltiples solicitudes de aplazamiento, lo que habría impedido una revisión completa de las evidencias.
Los abogados de Bolsonaro insisten en que tales decisiones del tribunal crearon un escenario de desigualdad procesal, vulnerando los principios de justicia y equidad. A su vez, sostienen que la confesión de Cid carece de validez, pues se habría obtenido bajo coacción, con versiones que fueron cambiando a lo largo de la investigación. Todo ello, aseguran, minó la imparcialidad del proceso y dejó a su cliente en un estado de indefensión.
Corte Suprema analizará nuevas apelaciones
Aunque el juez De Moraes no tiene un plazo específico para responder a los recursos, se espera que solicite un informe a la Procuraduría General de la República antes de definir una fecha para la audiencia donde se analizarán las apelaciones. De ser rechazadas, los condenados, incluido Bolsonaro, aún podrían presentar nuevos recursos, esta vez sobre el fondo de la sentencia, buscando modificar o anular la condena impuesta.

Bolsonaro, de 70 años, permanece en prisión domiciliaria en su residencia en Brasilia desde agosto pasado. En septiembre fue declarado culpable de encabezar un complot para mantenerse en el poder tras haber perdido las elecciones de 2022 ante Luiz Inácio Lula da Silva. La sentencia, considerada histórica, fue la primera en condenar a un expresidente brasileño por intentar derrocar el orden democrático.
Además del expresidente, fueron hallados culpables siete de sus aliados más cercanos, incluidos exministros y mandos militares, por delitos relacionados con el ataque a las instituciones y la promoción de un movimiento para desconocer los resultados electorales. Las penas varían, pero todas contemplan prisión y la pérdida de derechos políticos por largos periodos.






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