
El papa León XVI celebra este miércoles su primera misa de Navidad como pontífice en la Basílica Vaticana, en una ceremonia cargada de simbolismo y expectativa para millones de fieles en todo el mundo. La celebración inició a las 22:00 horas de Roma y marca uno de los momentos más importantes de su reciente pontificado.
La comunión se desarrolla en el corazón del Vaticano, con la presencia de cardenales, obispos, sacerdotes y fieles provenientes de distintos países. Esta primera Navidad de León XVI como líder de la Iglesia católica representa un mensaje de continuidad, pero también de renovación espiritual en un contexto internacional marcado por conflictos y tensiones.
Durante la liturgia, el pontífice denominó esta celebración como la “Navidad de la Paz”, haciendo un llamado directo a la comunidad internacional para que la festividad del nacimiento de Jesucristo sea un día de reconciliación, diálogo y esperanza. En su mensaje, pidió que la fe sea un puente para superar la violencia y las divisiones.
La misa de Navidad es solo el inicio de una serie de actos litúrgicos encabezados por León XVI en los próximos días. Entre ellos se encuentran las celebraciones del día de San Pedro y la tradicional bendición Urbi et Orbi, uno de los momentos más esperados por los fieles, en el que el papa dirige un mensaje al mundo entero desde la Plaza de San Pedro.
Asimismo, el 31 de diciembre el pontífice presidirá varios eventos importantes en el Vaticano, incluyendo una audiencia general, las primeras vísperas de la solemnidad de María Santísima Madre de Dios y el Te Deum, ceremonia de agradecimiento por el año que concluye.
Este primer ciclo de celebraciones navideñas permite observar las prioridades pastorales de León XVI, quien ha insistido en la paz, la unidad y la cercanía con los pueblos que sufren las consecuencias de la guerra, la pobreza y la crisis humanitaria en distintas regiones del mundo.






